Los actores guayaquileño Andrés Crespo y Alejandro Fajardo protagonizan Dignidad, una pieza del director español Ignasi Vidal, que se presenta el 9 de julio en Guayaquil. El 13 de julio se estrenará en Quito. Foto: Cortesía Casa Cino Fabiani
Los problemas que tratan los personajes de la obra teatral ‘Dignidad’, un thriller sobre la ética y la corrupción, parecen ambientados en los días previos al estallido del escándalo de corrupción de la compañía brasilera Odebrecht en Ecuador. Pero el texto original es español y la pieza fue estrenada por primera vez a inicios de 2015.
Los dos políticos hablan sobre presupuestos elevados “hasta el cielo”, procesos licitatorios bajo la sombra del peculado, dádivas a cambio de la adjudicación de contratos, cuentas millonarias en Panamá…
La versión que Andrés Crespo adaptó a la realidad y al lenguaje ecuatoriano a partir de la obra del español Ignasi Vidal, y que el propio Crespo protagoniza en Guayaquil junto al actor Alejandro Fajardo entraña un viaje emocional al desencanto político.
El drama imagina las consecuencias de un acto genuino de contrición en los entretelones del poder. Y reflexiona con dosis de humor sobre la forma como la corrupción, el ejercicio equivocado de la política y del poder, puede llenar los bolsillos, destruir a las personas y pervertir los lazos de amistad.
La pieza que el propio dramaturgo español vino a dirigir en la ciudad cuenta un encuentro entre whiskys de dos políticos amigos: Francisco (Crespo), líder de su partido, quien previo a la convención suena como candidato presidencial; y Alejandro (Fajardo), que espera acompañarlo como candidato a vicepresidente. Una serie de relevaciones cambiará el destino de ambos.
En su primera incursión en las tablas, Crespo logra marcar una diferencia con las interpretaciones que se le conocen en el cine. El personaje de expresión fruncida, boca virada, aparece en escena como en una lucha interna por imponer por una vez la honradez contra el habitual cinismo y la demagogia.
El personaje, al parecer motivado por un cargo de conciencia, es una máquina de producir citas sobre el tema de la obra. “Para cambiar las cosas tenemos que cambiar nosotros primero. (…) En general es nocivo hacer cosas que uno le crítica al oponente”, dice.
Fajardo, con gran experiencia en las tablas, termina exhausto tras casi una hora de despliegue físico e interpretativo, de pie durante casi una hora. Confiesa que la consigna con el director y productor de la obra fue “desubicar de su ambiente natural” a Crespo para marcar una diferencia con sus papeles en el cine.
“Mi trabajo es estar presente en el momento en que están sucediendo las cosas, no esforzarme en ser otra persona, nunca he tenido un interés camaleónico”, indicó Crespo.
‘Dignidad’ se estrenó a mediados de mes en un patio interior del segundo piso de la Casa Cino Fabiani, en el barrio Las Peñas, zona patrimonial del centro de Guayaquil. La capacidad es para 60 personas. “Es un aforo interesante para que la gente se involucre con el tema, más que en un teatro. Estar tan cerca de los actores te hace medio voyerista”, dice Fajardo.
Los dos actores coinciden en la “coincidencia brutal” de la obra con la situación política del país, pero sostienen que el montaje ha logrado el mismo nivel de identificación en México, España o Argentina. “Leí que el poder causa daño cerebral -comenta Crespo – la larga exposición al poder es como una radiación y lo primero que se pierde es el sentimiento de empatía, simplemente no necesitas a la gente una vez que tienes poder”.
Las funciones de jueves, viernes, sábados y domingos, a las 20:30, se extenderán hasta el primer fin de semana de julio. La noche de este jueves 29 de junio las 60 butacas recibieron al público que había comprado las entradas con anterioridad. Los boletos de este fin de semana están agotados, según los organizadores.
La propuesta teatral, producción de la Casa Cino Fabiani, se estrenará en Quito este jueves 13 de julio, a las 20h00, en El Teatro del Scala Shopping, con dos funciones más en la capital el viernes 14 y sábado 15 de julio.