Ramón Barranco, director artístico del teatro Sánchez Aguilar, se dirigió a los periodistas ayer martes en la noche: “La verdad es que es un gusto ver este teatro con tantas cámaras de fotografía y de televisión. Aunque yo sé que no siempre podemos contar con la presencia de alguien como John Malkovich, sería estupendo que estéis todos los días aquí”.
Con esas palabras el español abrió, oficialmente, la rueda de prensa de la obra ‘Las Variaciones de Giacomo’, que tiene como protagonista al actor estadounidense John Malkovich (nominado dos veces a los premios Oscar).
La sonrisa de Barranco al ver a tanto periodista cultural se desdibujaba con cada nueva pregunta sin sentido, dirigida a su invitado de honor, John Malkovich. El rostro de Barranco reflejó la vergüenza ajena propia de un anfitrión que organiza con alegría una fiesta y luego sale con la cara embarrada de pastel.
“¿Qué opina sobre la posición del Ecuador frente al asilo de Julian Assange?”, “¿Cuál es su plato ecuatoriano favorito?”, “¿Puede pronunciar guatita? ¿Gua-ti-ta?, ¿Ce-vi-che?”, “¿La obra será en español o en inglés?”
Esas fueron algunas de las preguntas (de las cuales hoy tuiteros de todas partes se burlaron repetidamente, convirtiendo hoy a #preguntasajohnmalkovich en Trending Topic) dirigidas a un John Malkovich que lució, a lo largo de toda la rueda de prensa, un rostro fruncido. Algunas preguntas fueron esquivadas con respuestas elegantes, otras ni siquiera merecieron su atención: no se molestó en responderlas.
Consultado por este Diario sobre lo sucedido ayer, Barranco se limitó a decir que “las mismas preguntas hablan por sí solas. No tengo más que decir a eso”.
También añadió que “ese es el periodismo cultural que tiene el país”. Cuando una periodista de ETV Telerama le pidió a Malkovich que les dé “consejos a actores ecuatorianos”, en plena rueda de prensa, Barranco lanzó un potente: “¡Wow””.
“Sí. Yo lancé un ‘Wow’. ¡Pedirle consejos para actores (ecuatorianos) que ni conoce! La respuesta que dio John (Malkovich) fue la apropiada”.
A la periodista de televisión, Malkovich se limitó a decirle: “I dont´t give advices” (Yo no doy consejos). A estas alturas, Barranco parecía arrepentido de haber dicho que se alegraba de ver el lobby del Teatro Sánchez Aguilar con tantas cámaras de televisión y de fotografía.