Hablar de Irlanda es hablar de la cuna de los grandes escritores de la lengua inglesa. Parece una ironía. Es una isla dividida políticamente en dos: la República de Irlanda e Irlanda del Norte. Ha vivido tensiones constantes con Londres. Tiene una lengua originaria, el gaélico, que se habla más bien en los pueblos pequeños; en las grandes ciudades solo se usan unas pocas palabras.