Según pude observar en la fotografía que EL COMERCIO publicó sobre el ganador del Concurso de Nacimientos, ya no se toma como tema central de los “nacimientos” el hecho que justifica, no solamente tales concursos, sino el hecho mismo de la Navidad: el nacimiento de Jesús. Ahora es una simple demostración de habilidades artesanales, folclóricas.
Pienso que el hecho mismo de que la Navidad se haya convertido en una fiesta comercial, ya la han deformado lo suficiente. Pero, al paso que vamos, es cada vez más otra fiesta “pagana”. Entonces, es por lo menos más real, menos ofensivo para los cristianos, que lo que realmente se celebra es el solsticio del 21 de diciembre.
No me imagino a los judíos que celebran su “Hanukkah” exhibiendo como símbolo algún artefacto ajeno a las 8 lámparas.