La actriz francesa Brigitte Bardot condenó la matanza de dos millones de gatos salvajes que el Gobierno de Australia planea en aras de proteger a otras especies en peligro.
Un gato bien cuidado, alimentado y con actividades físicas permanentes, no representa un mayor problema para sus dueños. Pero cuando por diversos factores, los humanos abandonan a varios gatos, especialmente en zonas silvestres, se corre el riesgo que los animales se conviertan en gatos ‘ferales’. Es decir, que vuelven a un determinado ecosistema y saquen a relucir más su instinto felino.