Hace un par de décadas, la esperanza de muchos para salir del anonimato era aparecer en televisión, llevarse aplausos de los espectadores y formar una carrera en el mundo del entretenimiento. Hoy en día, la dinámica ha cambiado un poco. Con la aparición de las redes sociales, ese ímpetu de fama y reconocimiento se ha trasladado a otros espacios digitales.
Vivimos en una época en la cual, al añadir la etiqueta de “según la ciencia” o “según la física”, cualquier afirmación puede sonar seria, incluso si no tiene ningún sentido. Es el caso del nuevo engaño viral que recorre las redes sociales: el de las pelotas que se agrupan en una máquina según sus colores.