Lamentablemente, ya no causa sorpresa y sí mucha indignación que la política y quienes participan activamente en ella no ha cambiado en nuestro país desde varias décadas. En todos los gobiernos que me ha tocado conocer, siempre, hasta la actualidad a quienes piensan diferente se los ha maltratado verbal, físicamente, con prisión, destierros, etc. Desde el miércoles ha sido la principal tendencia en redes sociales y también información en medios de prensa independientes la agresión física que fuera objeto la asambleísta de oposición Lourdes Tibán. Muchas veces no es necesario tener pruebas para acusar a alguien cuando la voz del pueblo se pronuncia masivamente por todo lado. Quizá desde el caso de Abdón Calderón Muñoz no ha existido otro similar en que en un gobierno se castigue y se juzgue. El país atraviesa momentos críticos. No sacamos nada con la violencia hacia líderes sociales. Esto agrava la situación interna y externa del Ecuador. No acuso a nadie. Aspiro que esta carta llegue a
Observé el fin de semana pasado la maravilla arquitectónica del edificio de la Unasur. Me maravillé por su buen gusto, pero también por su abandono y soledad.
Como Latinoamericano, me duele el hecho que el Presidente de Ecuador, mi país, se haya referido al premio Nobel de Literatura, premio Príncipe de Asturias, premio Rómulo Gallegos, etc, etc, y autor de más de dos docenas de libros muy interesantes y de lectura profunda, como “un limitado, sin muchas luces….”. Realmente en nuestro país, así se ratifican las evaluaciones internacionales de que no se lee ni un libro al año por persona, y parecería que estas evaluaciones van desde lo más alto. Cierto y lamentable es que Vargas Llosa, es un hombre identificado con el pensamiento político de “derecha”, pero no es menos cierto que Correa es un populista más o igual que Abdalá Bucaram. Vargas, ha sido muy inteligente y hábil en no mezclar su ideología con su escritura, y muchas veces ha atacado a líderes de derecha como Pinochet y Fujimori, por ejemplo. Lo que no ha hecho Vargas Llosa y quizá por eso es “limitado y sin luces” es inventarse una novela de ficción donde haya un Presidente que se c