Desde el abismo, el Presidente Noboa aprovecha las fuerzas inerciales de la política para iniciar la salida de la crisis causada por los desgobiernos populistas de Correa, Moreno y Lasso, que no dieron la talla para ser Jefes de Estado. Mas, las medidas de Noboa para cubrir el déficit, siendo compatibles con el período corto del gobierno, no alcanzan para reversar la situación, aunque pueden darle una posición negociadora si sigue bajando el riesgo país, para optar por créditos internacionales no tan caros. Esto siempre que se focalicen también los subsidios al diesel, que debe ser una medida permanente para atender necesidades permanentes.
Vemos que el Presidente ha iniciado también la recuperación de la autoridad frente al secuestro de las cárceles, mediante la acción decidida de las Fuerzas Armadas, cuyo costoso trabajo debe continuar hasta cuando sea necesario para lograr la paz social. Para el ejercicio de esta autoridad se necesita dinero y el país ha dado muestras de querer colaborar, excepto los partidos Social Cristiano y Correísta, que están cavando su propia tumba, al oponerse salir del abismo, implantando una nueva política redistributiva que implique equidad y justicia social.
El Presidente Noboa ha tomado medidas de corto plazo, ingresos por una sola vez o anticipos de impuestos, pero los inversionistas requieren compromisos para el mediano plazo como la subida del IVA. Para eso percibo que las élites están persuadidas que la concentración del ingreso en pocas manos nos ha llevado a la ruptura de la paz y que es hora de cambiar la orientación, a fin de que Noboa no camine por un rumbo desesperado.
Los dineros que entrarán en este año servirán también para la sostenibilidad fiscal que le confiera confiabilidad a la inversión privada. A tales efectos es plausible advertir una actitud positiva de los sectores adinerados y de la clase media alta, para hacer del Ecuador otro país, a base del esfuerzo sostenido de su gente, que soslaye al paternalismo acomplejado. Ojalá el liderazgo de Noboa siente las bases que conduzcan a estos fines.