La sucesión de la vicepresidencia se dio en pocos días, con un profesional en economía y conocedor de la realidad nacional por el medio radial a que está vinculado y por otros espacios en que ha participado. Sin que antes Otto Sonnenholzner haya sido actor político, sus primeras expresiones y acciones han sido positivas, significando confianza para el Ecuador. Que se le dé la oportunidad de ser más protagonista, en la proximidad del Presidente Moreno, sería lo ideal.
El país quiere conocerlo más. Los que estaban esperando un ungido listo para suceder al Presidente – alguien decía “ya planchando la banda presidencial” – por ahora deben resignarse.
A los años hay real Ministerio de Gobierno, en su complejidad de orientar la política, de darle coherencia al accionar gubernamental y apoyar al control del orden público. El fraccionamiento del Ministerio de Gobierno en el correato, con diversos nombres, fue para colocar “cumple órdenes”, con menos o más presencia. María Paula Romo es Ministra de Gobierno, reunificando las denominaciones en que se partió al Ministerio. En la coordinación con la Asamblea, para la designación del Vicepresidente y otras acciones y decisiones, se la vio actuar, también ante el riesgo de paralización de una parte del transporte público, sin ir a la represión. Se la percibe honesta cuando asume compromisos y expresa juicios de valor.
Paúl Granda ofrece encausar al IESS. Ojalá lo haga. Sus problemas son múltiples, en cuanto a financiamiento, costos innecesarios, una percepción de parcelación de espacios por quienes hacen tráfico de influencias, un endeudamiento inmenso, parte aun no reconocida por falta de verificaciones, cuando urgentemente se debe saber qué se debe reconocer –programando pagos- y rechazando lo que no se deba pagar. Pero si debe reclamarse lo que no funciona.
Respira el gobierno con el reciente crédito chino por USD 900 millones, que podría permitirle efectuar pagos hasta finalizar el año; pero, en la real programación de cómo ir adelante en la economía estamos en “esperemos”, con anuncios que se quedan en tal condición.
En anticorrupción se está en mora. La Contraloría General del Estado ha producido exámenes contundentes, pero aún falta mucho por transparentar. La transparencia no debe tener peros. La reserva debe tener como limites evitar que fracase una investigación, pero cerrada ésta, todo debe transparentarse.
No hay renuncia a soberanía, de obtener colaboración internacional, como se dio en la Comisión que se formó en Guatemala.
No se alcanzará respetabilidad ética de no tomarse decisiones y acciones tangibles contra la corrupción.
La percepción es que sigue imperando la impunidad.