Gerard Piqué, central del Barcelona, envió hoy sus buenos deseos a su colega portugués Pepe, del Real Madrid, quien abandonó el hospital tras mantenerse internado durante 18 horas por un duro choque en el 1-1 del domingo ante el Valencia.
Pepe guardará reposo en su domicilio las próximas horas, con los médicos del Real Madrid pendientes de su evolución, según informó el club blanco.
El central portugués ingresó en la noche del domingo en el hospital y presentó un “estado confuso y agitación”, por lo que tuvo que ser “sedado”, explicó el comunicado.
“El paciente ha permanecido estable con buen nivel de conciencia”, explicaron los médicos del Real Madrid sobre su convalecencia hospitalaria.
La acción ocurrió en los minutos finales de la primera parte del encuentro entre el Real Madrid y Valencia, justo en la jugada que significó el empate 1-1 del equipo visitante, a la postre definitivo.
En ese lance, Pepe chocó brutalmente con el arquero Iker Casillas, por lo que ambos tuvieron que ser atendidos sobre el campo. El portugués se llevó la peor parte y no pudo continuar.
El estado de Pepe permite poner en duda su participación en el partido del jueves, entre Barcelona y Real Madrid en el Camp Nou, correspondiente a la ida de la Supercopa. Piqué deseó hoy lo mejor para su rival. “Acabo de ver las imágenes por TV. Son escalofriantes. Espero que no sea nada grave y que pronto pueda volver a jugar!
Ánimo Pepe”, escribió en Twitter. El central azulgrana no pudo ver el domingo el impacto porque a esa hora estaba en el Camp Nou para jugar contra la Real Sociedad.