La pandemia no minó el optimismo del entrenador Miguel Ángel Ramírez

El entrenador español de Independiente del Valle, Miguel Ángel Rampirez, en el primer entrenamiento en el Centro de Alto Rendimiento de Chillo Jijón. Cortesía de Comunicación IDV

El entrenador español de Independiente del Valle, Miguel Ángel Rampirez, en el primer entrenamiento en el Centro de Alto Rendimiento de Chillo Jijón. Cortesía de Comunicación IDV

El entrenador español de Independiente del Valle, Miguel Ángel Rampirez, en el primer entrenamiento en el Centro de Alto Rendimiento de Chillo Jijón. Cortesía de Comunicación IDV

Detrás de la oscura mascarilla con el logo de Independiente, los músculos faciales delataban a Miguel Ángel Ramírez. El entrenador español no dejaba de sonreír durante la jornada del miércoles pasado, la primera de la nueva normalidad del fútbol.

Ese día, luego de casi tres meses de solo mirarse a través de una computadora, el entrenador pudo verse con sus pupilos de Independiente, con sus asistentes y con el personal de logística. “Todos queríamos darnos un abrazo, pero no pudimos. Pero ya pudimos regresar a la cancha a disfrutar de lo que más nos gusta”.Ramírez es un hombre optimista. De hecho, uno de sus oficios, el de coaching, le ha puesto en la senda de aquellos que siempre intentan ver el vaso medio lleno en todas las situaciones.

“En la pandemia hubo mucho sufrimiento. Lo hemos pasado mal, pero tenemos la suerte de contar con toda nuestra familia. Aquí y en España. Hay que ser agradecidos y mirar el futuro con optimismo”, asegura el ‘Míster’, campeón de la  Copa Sudamericana el año pasado con los rayados.

Entrenar es uno de los placeres de la vida que más disfruta el DT ibérico.
Cada día llega al complejo de Chillo Jijón a las 07:00 para reunirse con sus asistentes y preparar los detalles del trabajo diario. En su grupo de trabajo,  Ramírez cuenta con españoles (el preparador físico Fran Trujillo y el asistente técnico Felipe Sánchez); un portugués (el preparador de goleros Ricardo Pereira) y un argentino (el también asistente técnico Martín Anselmi). Por ello, los mates y los cafés se multiplican en la asignación de tareas.

Ramírez añoraba tanto su día a día, la planificación de los trabajos, que no siente apuro o desesperación por volver a sentarse en el banquillo en el reinicio del torneo. “Me lo tomo con calma. A mí me gusta mucho el día a día, la interrelación con los jugadores, con mi cuerpo técnico. Ya llegará el momento en que retomemos la competición”.

Parte de la prédica del coaching es aceptar los procesos tal cual suceden, sin precipitarse, ni adelantarse. Bajo ese concepto, el entrenador está muy consciente que la máquina aceitada que logró ensamblar en Independiente necesita de un tiempo para volver a funcionar con la precisión mostrada a finales del año pasado e inicios de este.

“Nos tomará tiempo aceitar la máquina, pero estamos seguros que los jugadores volverán a adaptarse a los conceptos de juego. Sin embargo, ahora tenemos lo que tenemos: hay que entrenarse así, de forma individual, tal como lo han establecido los protocolos”, dijo.

Por eso, en las primeras horas de trabajo el DT y el preparador físico, Fran Trujillo, repetían la misma arenga: “¡Vayan a su ritmo! ¡Mantengan su ritmo!”, les pedían continuamente a sus futbolistas.

Efrén Mera, capitán de los rayados, dice que Ramírez es la piedra angular del equipo que ha sorprendido a la región con un fútbol basado en el juego de posición y con una continua obsesión por el balón y la ocupación agresiva de los espacios en la cancha. “Miguel es un gran estratega, un técnico que está en todos los detalles. Es el gran ‘culpable’ del actual éxito del equipo”.

El español de 35 años, que además de coach y director técnico es doctor en Ciencias del Deporte, mantiene un nexo cercano de los jugadores. La semana pasada, antes de que Alan Franco concretase su traspaso al Atlético Mineiro brasileño, mantuvo diálogos continuos con el jugador.

El optimismo de Ramírez le transmitió tranquilidad al volante nacido en la localidad guayasense de Jujan. “En el Mineiro te vas a encontrar con un técnico (Jorge Sampaoli) que juega a lo que nosotros jugamos, a lo que tú sabes”, le dijo a Franco. El DT es incapaz de ver un vaso medio vacío.