Macarena se entrena cinco horas al día con su caballo Tambo Tauro bajo la dirección del entrenador José Cristiano. Foto: EL COMERCIO
La medalla es de bronce, pero es olímpica, la meta que todo deportista anhela lograr. La amazona Macarena Chiriboga alcanzó el tercer lugar en la prueba por equipos que se realizó el 20 de agosto de 2014 en Nanjing, ciudad donde se desarrollaron los II Juegos Olímpicos de la Juventud.
A sus 18 años le entregó al país una medalla histórica. El marchista Jefferson Pérez es el único atleta ecuatoriano en lograr dos preseas olímpicas, oro y plata en los Juegos Atlanta 1996 y Pekín 2008. En Singapur 2010, el azuayo Joel Villavicencio subió al podio para recibir una medalla de plata en los 10 km marcha en los I Juegos Olímpicos de la Juventud. Macarena es la única deportista dama que ha logrado para Ecuador una presea olímpica.
“Los deportistas soñamos con ganar una medalla en los Juegos Olímpicos, yo lo pude hacer”, dijo Macarena a su retorno al país, tras compartir el podio con Polly Serpell de Islas Caimán, Sabrina Rivera de El Salvador, Stefanie Brand, de Guatemala; y María Gabriela Brugal, de República Dominicana, pues compitió con el equipo centroamericano.
Un año antes había ganado la clasificación a los Juegos Olímpicos en la Copa Americana de salto que se realizó en Argentina, pero recién 15 días antes de la fecha prevista para el viaje de la delegación a China se confirmó su participación.
Se entrenó por 15 días con ocho caballos diferentes, pues no llevó el suyo porque la organización adquirió 30 caballos de origen europeo y tras un sorteo, se asignó uno a cada jinete.
Macarena recibió un equino de origen belga, de 6 años con el que tuvo que acoplarse con tan solo dos días de práctica. “Afortunadamente tuve empatía con Brigan y pude acertar la forma como conducirlo”.
El día que alcanzó el podio lo recuerda con mucha alegría y claridad. “Me levanté muy feliz, con la confianza que algo bueno iba a vivir. Sabía lo que tenía que hacer y todo resultó muy bien”.
Ese 20 de agosto vio plasmado todo el esfuerzo de ella y de su familia. Del tiempo y las horas de entrenamiento a las que ha dedicado desde los 7 años, cuando decidió abrazar este deporte como parte de su vida.
Su madre, Verónica Granja, recuerda que cuando tenía cuatro años de edad, la motivó a montar caballos como un hobby de fin de semana. Jamás se imaginó que aquella propuesta iba a terminar en un podio olímpico.
“La temporada anterior fue muy rendidora por la medalla que logré para el país y por todo lo que ha venido después. Han sido importantes los reconocimientos al esfuerzo que realizamos todos los deportistas”, expresó la deportista que ha postergado sus estudios universitarios. En junio del año pasado alcanzó su título de bachiller en el Colegio Americano y por su participación en los Juegos Olímpicos, en agosto, no ingresó a la universidad. En enero tampoco lo hará por su viaje a Alemania, mientras tanto, estudia francés.
Para ella no es sacrificio pues su meta a largo plazo es participar en los Juegos Olímpicos de mayores, Río 2016 o Tokio en 2020.
Hoja de vida
Origen
Nació en Quito el 12 de junio de 1996. Practica la equitación desde los 7 años.
Trayectoria
Ganó tres títulos provinciales, tres campeonatos nacionales
y dos en el torneo americano de salto infantil y prejuvenil. En Ecuador concursa con el caballo Tambo Tauro, de 13 años. Es la única medallista olímpica de Ecuador en esta categoría y disciplina.