El entrenador Miguel León y su deportista, José Álvarez, en la pista de tiro con arco del sector de La Vicentina. Foto: Alfredo Lagla / EL COMERCIO
José Álvarez llevará su arco y sus flechas a Toronto para los Juegos Panamericanos, en julio próximo. Es el único deportista ecuatoriano que logró el cupo al certamen continental. “Va a ser un torneo muy duro, el nivel de América en tiro con arco es alto”, dice el deportista de los registros de Pichincha.
Cuando cumplió 12 años, su madre, Tania Muñoz, lo llevó a las instalaciones del Palacio de los Deportes, en La Vicentina, para que practicara este deporte curioso y diferente. “Me gustó y me quedé, de eso han pasado seis años”.
De su madre habla mucho. “Nos llevamos muy bien, tenemos una gran comunicación, es una amiga”. Tania ya
se acostumbró a los viajes y las prolongadas ausencias, porque en estos seis años José ha escalado en los escalafones nacionales y de América.
En 2012, en su primera participación internacional, logró un segundo lugar en un torneo panamericano. En ese mismo certamen también se ubicó en cuarto lugar en la categoría abierta, “desde que cumplí 16 años me gusta competir con los deportistas adultos, así gano experiencia”.
En los Juegos Bolivarianos Perú 2013 ganó una medalla de plata, y en 2014 alcanzó en Argentina su cupo a los Juegos Panamericanos del 2015, al ubicarse en cuarto lugar detrás de Elías Malavé (Venezuela), Olmo Parrilla (Guatemala) y Daniel Martínez (República Dominicana).
“Empezó el año 2014 con una marca de 612 puntos y terminó con 654 de los 720 tiros en la pista de 70 m. Ha crecido mucho en el aspecto técnico, que es donde se mide nuestro deporte”, expresó Miguel León, su entrenador en Pichincha y en la Selección del Ecuador.
Ante ese crecimiento técnico evidente, José y Tania decidieron hacer un alto en su formación académica. En julio logró el título de bachiller y no ingresó a la universidad. “Nos impusimos dos metas, lograr el cupo a los Panamericanos y luego a los Olímpicos. El primer objetivo ya lo conseguimos, en octubre intentaré lograr el cupo a Río de Janeiro. Ecuador nunca ha intervenido en tiro con arco a nivel olímpico, quiero ser el primero”.
Como único representante ecuatoriano en tiro con arco, pasó a formar parte del Plan de Alto Rendimiento que financia el Ministerio del Deporte. Gracias a ello recibirá una remuneración básica unificada cada mes, y su plan a los Panamericanos incluirá su participación en la Copa Merengue, en República Dominicana, donde compitió hace dos semanas.
En junio intervendrá en el Campeonato Mundial Juvenil en Dakota del Sur, Estados Unidos, del 18 al 24 de ese mes. Luego estará en un centro de entrenamiento en México y de allí viajará a Toronto. Además, tendrá la asistencia de un médico y de un nutricionista, y recibirá medicación y vitaminas para su preparación. Invertirá unos USD 3 000 para adquirir alguna implementación deportiva para encarar los Juegos Panamericanos.
“Mi entrenador es el deportista que más admiro, es mi ídolo. Él fue el primer latinoamericano en ganar una medalla de oro en tiro con arco en Juegos Panamericanos. No sé
si pueda hacerlo en este año, pero quiero igualar ese récord”, expresa José. Hasta entonces, las medallas de oro se repartían entre canadienses y estadounidenses.
El entrenador cubano al escuchar esa afirmación se siente emocionado y recuerda que esa medalla la alcanzó en los Juegos realizados en La Habana, en 1991. “Lo puede hacer, tiene todas las condiciones”, responde el medallista panamericano al halago recibido.
Entre José y Miguel existe una gran amistad y sobre todo comunicación. “Él fue deportista y sabe lo que siente uno antes de cada participación”.
El trabajo diario incluye el entrenamiento en gimnasio por una hora y media, esas sesiones de pesas le han permitido moldear su torso y definir la musculatura en sus brazos. También trota alrededor de los escenarios del Palacio de los Deportes antes de ingresar a la pista de lanzamiento de tiro con arco, ubicado detrás de la pared de escalada deportiva. Todos los días realiza 150 lanzamientos, “la mayoría terminan en el centro”.
Describe al tiro con arco como un deporte que requiere gran esfuerzo físico y mental. “Es difícil halar el arco, enfocar la diana y acertar al centro. Es un deporte de permanente adrenalina, creo que por eso me gusta”.