Una Buenos Aires caliente, húmeda, agobiante, recibió ayer a Liga Deportiva Universitaria. Concentrados en el Hotel Sheraton, el representante ecuatoriano en la Copa Sudamericana llegó anteanoche con un solo objetivo: derrotar a Vélez Sarsfield y clasificar a la final.
El campeón ecuatoriano llegó con una ventaja de 2-0. Es to permite respirar con optimismo para el partido de hoy, a las 19:15 de Ecuador, en el estadio José Amalfitani.
Patricio Torres, vicepresidente de LDU, ya tenía las 200 entradas para los ecuatorianos que quieran apoyar a ‘La Bordadora’. Al menos 100 son para los que acompañaron a la delegación en el vuelo chárter.
En los jugadores hay una combinación de ansiedad y serenidad. Para Paúl Ambrosi: “Siempre hay que mirar para adelante, pero para pensar en la final hay que pasar este partido. Es mejor estar siempre tranquilos”.
“La ansiedad existe, pero cuando comienza el partido, las cosas empiezan a tranquilizarse”, dice Hernán Barcos.
Liga reconoció ayer la cancha de Vélez, ‘El Fortín’. Realizó un entrenamiento para recuperarse del viaje, durante 15 minutos. El técnico Edgardo Bauza dirigió un trabajo táctico con el equipo titular.
Se especulaba con un 5-4-1 en la alineación alba. “No, no, no. Nunca jugamos con línea de cinco”, aclaró el asistente técnico Luis di Leo. En defensiva vamos a jugar con tres. Lo que no queremos es meternos muy atrás porque a la larga perjudica y Vélez es muy difícil”.
“Jugaremos muy similar a lo que se hizo en Quito desde lo táctico. Vélez va a jugar casi con tres delanteros. Es un equipo que presiona mucho y bien. La tenencia del balón va a ser la clave”, dijo Bauza.
Un clima difícil tendrá Liga a la hora del juego. Se pronostica lluvias e incluso tormenta.