Foto de archivo del defensor del Paris St Germain’s Thiago Silva en el calentamiento previo al choque con Burdeos por la liga de Francia. Reuters
El París Saint-Germain cierra una era con la decisión de despedirse de Thiago Silva, su capitán y emblemático jugador en la época reciente del club, que tiene que pensar ahora qué ocurre con Edinson Cavani, otro ídolo del Parque de los Príncipes.
‘O Monstruo’ Thiago Silva (35 años) acumula un palmarés espectacular con el PSG, con más de veinte títulos en ocho temporadas en Francia, pero con una mancha en su hoja de servicios, la de no haber podido ayudar al equipo a levantar el más codiciado de los trofeos, la Liga de Campeones.
Thiago Silva termina su contrato en París el 30 de junio y hasta el último momento esperaba poder renovar, al menos hasta 2022, el año del Mundial de Catar, que sería el último gran objetivo de su larga carrera. El diario L’Équipe publicó el lunes en su web que el PSG decidió poner un punto final a esta relación.
“Para nosotros sería genial continuar en el PSG (…) Los niños han crecido aquí, nos gustaría continuar nuestras carreras en París”, llegó a decir su esposa al diario Le Parisien a mediados de mayo.
El director deportivo del París Saint-Germain, el también brasileño Leonardo, fue en su día el gran artífice de su llegada por todo lo alto al club en 2012, procedente del AC Milan. Y fue el propio Leonardo el encargado de pasar la página de esta etapa, por motivos deportivos y económicos.
Con pérdidas estimadas en más de 226 millones de dólares por el club por los efectos de la crisis sanitaria del nuevo coronavirus, el PSG necesita reducir su masa salarial, que supera los 339 millones de dólares. Thiago Silva es uno de los jugadores con un salario más importante.
De la remontada sufrida ante el Barcelona en 2017 a la del Manchester United en 2019, Thiago Silva es uno de los símbolos de las eliminaciones del PSG en las Ligas de Campeones, que lastran las aspiraciones de gloria de los propietarios cataríes.
Para reemplazarlo, el PSG tiene un sucesor ideal en su plantel, Marquinhos, igualmente brasileño. Este jugador de 26 años, carismático y ejemplar tanto dentro como fuera del campo, podría liderar una nueva etapa del equipo.
Marquinhos fue el primer jugador latinoamericano del equipo en regresar a Francia tras el parón del COVID-19, a tres semanas de que se reanudaran los entrenamientos. Como vicecapitán, no oculta que aspira a heredar tanto el brazalete como el estatus de jefe de la defensa parisina.
“Si en un momento dado tengo que ser el capitán, voy a intentar hacerlo de la mejor manera posible” , dijo Marquinhos a la AFP en una entrevista el pasado noviembre, destacando todo lo que había aprendido al lado de Thiago Silva.
“Ser el mejor defensa el mundo significa mucho. Es un objetivo personal, que puede también ayudar a los objetivos del equipo”, añadió entonces, antes de renovar su contrato hasta junio de 2024.
Junto a él, el PSG tiene a Presnel Kimpembe, Thilo Kehrer, Abdou Diallo y a la joven promesa Tanguy Kouassi (18 años) , que está a punto de firmar su primer contrato profesional, por lo que el club no parece tener urgencias para fichar en el centro de su defensa.