La victoria de Aucas transcurrió en medio de un encuentro con pocos momentos de lucidez futbolística. En el estadio de Chillogallo se repitió una tónica usual en este torneo de ascenso. El local busca desde el comienzo, mientras que el visitante espera que transcurra el tiempo y su prioridad es defenderse.
En el equipo de Alfredo Encalada se notó la para de 21 días a la cual, por cuestiones de calendario, debió acogerse. Durante los primeros minutos, Aucas apareció duro, escasamente conexo en su ofensiva.
Los minutos finales de la primera etapa, cuando el eje productivo (Diego Quintanilla, Christian Balseca y Gustavo Figueroa) se encontró. La sociedad funcionó bien y ahí, precisamente, llegaron los goles de Balseca (37’ y 45’) y Quintanilla (41’).
Con el triunfo casi escrito, Aucas volvió después del descanso, aminoró la carga de ataque y controló las mínimas opciones de su rival, que apenas capitalizó el descuento mediante Víctor Chungandro ( 54’), quien cazó un rebote del golero oro y grana José Luis Chamorro.
Fue la ocasión de hacer cambios. Salió Valdier Verdugo, poco conectado con Figueroa en la delantera, para dar paso a Roberto Ordóñez. ‘La Tuca’ ganó presencia ante el pobre físico de los visitantes, pero no tuvo puntería en un par de ocasiones que pudo castigar el arco del golero Wilson Duque, el mejor de Saquisilí.
Patricio Avilés y Arcenio Nazareno ingresaron por Quintanilla y Balseca, respectivamente. Quintanilla resultó el jugador más aclamado por los cerca de 5 000 aficionados que llegaron al estadio de Aucas. Su presencia en el medio sector fue una de las pocas luces que tuvo el partido.
Ahora, Aucas ya prepara el próximo duelo frente a Juventud Minera, su rival por el primer puesto. El partido se jugará en el estadio de la Liga Cantonal de Echeandía (Bolívar), en día y hora a definirse mañana en la Federación Ecuatoriana de Fútbol.