Alí Karimi, la máxima estrella del fútbol iraní y apodado el ‘Maradona de Asia’, fue despedido ayer de su club, el Steel Azin Teheran. La causa no fue deportiva sino religiosa: Karimi no respetó las reglas de ayuno del Ramadán.Durante el mes del Ramadán, que en Irán comenzó el jueves, los musulmanes no están autorizados a comer y beber durante el día, y eso incluye a futbolistas que deben entrenar con temperaturas de hasta 35 grados y sin beber agua. Karimi, jugador del Bayern Múnich entre el 2005 y el 2007, ya fue criticado duramente en ocasiones anteriores por varios medios oficiales de prensa iraníes por no ayunar durante el Ramadán. El jugador, de 31 años, tuvo también enfrentamientos con la dirección de su club, la selección nacional y la Federación Iraní de Fútbol. En Alemania, un país con una importante población musulmana, el problema del ayuno se resolvió con un permiso especial para los jugadores, quienes compensan los días de entrenamientos con ayuno en sus días libres. La razón: el futbolista es le sostén de su hogar.