Hace 300 días, el arquero Manuel Neuer entró al Bayern Múnich, pero con la hinchada de los bávaros en contra. Los fanáticos llevaban letreros al estadio que decían “No a Neuer”. Hoy, con el Bayern en la final de la Liga de Campeones, el arquero es el ídolo de los muniqueses.
“Jugar en el Bayern me genera una gran ilusión. Quiero ganar muchos títulos”, decía Neuer a principios de junio del 2011 al anunciar su despedida del Schalke 04, el equipo de sus amores.
Neuer había iniciado aún adolescente su carrera en el club de Gelsenkirchen, su ciudad natal. Con los años se convirtió en la cara de un club que sentía su hogar y que comenzaba a rearmarse con estrellas como el español Raúl o el holandés Klaas-Jan Huntelaar.
En camino a los 26 años y convertido ya en ídolo de la Selección alemana, el arquero renunció a esa comodidad para buscar más retos. Y así llegó al Bayern por USD 30 millones y con un contrato hasta el 2016.
La exigente hinchada bávara no entendió el caro fichaje de un arquero tan identificado con los colores de otro club y lo martirizó exhibiendo miles de carteles con la leyenda “Koan Neuer” (no a Neuer) en sus primeros partidos.
El rubio de 1,93 metros y 90 kilogramos no tardó en demostrar su solidez bajo los tres palos y a principios de octubre logró ya un hito histórico: tras 1 018 minutos seguidos sin recibir un gol en partidos oficiales superó el récord que tenía en el Bayern el mítico Oliver Kahn.
Un mérito doble si se piensa que la defensa del Bayern es el flanco más débil del equipo.
Neuer ya mostró sus cartas de héroe hace un mes, cuando metió al Bayern en la final de la Copa Alemana brillando en la tanda de penales contra el Borussia Mönchengladbach. Pero la consagración definitiva sólo podía llegar ante un gigante como el Real Madrid y frente un grande como Cristiano Ronaldo: Neuer atajó el penal del portugués y luego el del brasileño Kaká.
“Espero que los últimos escépticos en Múnich hayan entendido ahora por qué contratamos a Neuer”, celebró con revancha el presidente del Bayern, Uli Hoeness.