Los árbitros José Lara y Fabián Muñoz no aprobaron las pruebas físicas a las que fueron sometidos ayer los jueces de primera categoría.
Los dos llegaron a esta evaluación con distensiones musculares que les impidieron realizar las pruebas de velocidad y resistencia que establece la Federación Internacional de Fútbol Asociado (FIFA).
La prueba comprendía un recorrido de 40 metros distribuidos en seis piques en los que, según el reglamento de la FIFA, cada árbitro debía cumplir esos intervalos en mínimo seis segundos con 20 milésimas.
Lara y Muñoz tendrán otra oportunidad de someterse a esta prueba dentro de un mes. Lo harán junto a los árbitros de la Segunda, Tercera y Cuarta categorías. “Ellos deberán someterse a una rehabilitación física y luego presentarse a dar la evaluación”, sostuvo Bomer Fierro, miembro de la Comisión Nacional de Arbitraje de la Ecuafútbol.
A más de las pruebas físicas, los réferis rindieron una evaluación académica. Esta les planteaba situaciones reales de juego a las que ellos debía responder, basándose en el reglamento.
Él próximo mes la Comisión Nacional de Arbitraje darán a conocer los resultados de las evaluaciones y se elaborará el nuevo escalafón del arbitraje ecuatoriano.