Ismael Chango
Ex taekwondosista azuayo
El deporte me permitió representar al Ecuador en cuatro mundiales de taekwondo, incluso en uno de esos fui noveno. También he aportado con algunas medallas de oro, plata y bronce en torneos sudamericanos y panamericanos.
Me siento orgullo de haber vestido los colores de la selección nacional. El momento más glorioso para un deportista es cantar el himno nacional y yo tuve ese privilegio. Es gratificante que seleccionados de otras naciones te escuchen cantar el himno y lo hagan con el debido respeto.
Solo viviendo esas experiencias se puede inculcar a quienes vienen detrás. En la actualidad, en el gimnasio de mi padre aprovecho las noches para formar a niños, adolescentes y jóvenes. A ellos le inculcó valores y les recomiendo que sean responsables si quieren triunfar en la vida.
Ahora como médico también aporto al país. Aparte de mi labor diaria, cada fin de año, con otros colegas, visitamos diferentes comunidades y brindamos atención gratuita; además llevamos alimentos y ropa. Quiero devolver al país todo lo que recibí como seleccionado nacional.