Un nuevo incidente en pista entre los pilotos de Mercedes Benz, que evitó otro doblete del equipo alemán en el GP de Bélgica, disparó las alarmas al interior del equipo alemán y volvió a tensionar la frágil relación entre Lewis Hamilton y Nico Rosberg.
Tras el pinchazo del neumático trasero izquierdo que el inglés sufrió debido a un tope con el alerón delantero derecho de su compañero, Hamilton cayó a los últimos lugares y perdió toda posibilidad de luchar por los puestos puntuables.
Además, el ingreso a pits de Rosberg para cambiar neumáticos y la ‘nariz’ de su monoplaza le hizo perder valiosos segundos que el australiano Daniel Ricciardo (Red Bull) supo aprovechar para llevarse su tercera victoria de la temporada.
Con ello, Mercedes solo pudo sumar 18 puntos de 43 posibles y permitió el acercamiento de su rival austríaco en las clasificaciones de pilotos y escuderías.
La reacción de la escudería no se hizo esperar. La celebración que precedería al esperado doblete fue reemplazada por una larga reunión con los pilotos que estuvo presidida por los máximos dirigentes de Mercedes: Toto Wolff, Paddy Lowe y Niki Lauda, quienes buscaban explicaciones a lo sucedido.
Hamilton acusó a Rosberg de actuar con premeditación, como represalia ante su negativa de dejarse adelantar por él en el pasado GP de Hungría. Rosberg, por su parte, se apoyó en la decisión de los comisarios y se limitó a decir que se trató de un incidente normal de carrera.
Al final, las declaraciones de Wolff, director ejecutivo del equipo, dieron cuenta del malestar y descontento que la pugna entre ambos pilotos causa en el seno de la escudería, y anunció sanciones en caso de que la situación se repita.
“Se infringieron reglas establecidas y se sobrepasaron límites”, indicó, además de señalar la posibilidad de que en lo posterior Hamilton y Rosberg pudieran enfrentar consecuencias derivadas de sus actuaciones.
Wolff incluso habló de que el equipo pudiera establecer una jerarquización entre ambos pilotos, con el fin de asegurarse de que los hechos de Spa Francorchamps no se repitan. Con esta posición difiere Lauda, quien sigue apoyando la libre competencia entre los pilotos.
Aunque Rosberg aventaja a su compañero Hamilton en la clasificación general, nada está dicho aún sobre su futuro. El propio Ricciardo tiene posibilidades, en caso de mantener su racha ganadora.