En abril del 2014, el señor Presidente afirmó que seguirá defendiendo su honra, que va utilizar el sistema judicial para ventilar conflictos. Es decir, a confesión de parte relevo de prueba. Ya en anteriores ocasiones el señor Presidente confesó que él iba a meter la mano en la justicia y nuevamente ratificó dicha expresión, que no solo mete la mano, porque va utilizar el sistema judicial, lo que en español significa: aprovecharse de una cosa, valiéndose de ella, manipulándola como él lo desea. El señor Presidente es el gobernante que más ha injuriado impunemente. Los ultrajados nunca pudieron hacer uso del animus retorquendi (devolver injuria por injuria) que es una resistencia natural lógica de los seres humanos cuando se sienten ofendidos en su honor y reputación.
Cuando el señor Presidente se bajó del automóvil acompañado de sus guardaespaldas armados, para avasallar por sentirse injuriado por una yuca, y cuando reprendió personalmente al joven utilizó así el animus retorquendi y esto era más que suficiente para que se produzca la compensación de injurias (incluso se sobrepasó con creces y en tropel). Es decir, la ofensa recibida con una yuca, la compensó tomándose la justicia por su propia mano, con un ataque violento en cuadrilla.