Qué barbaridad, ni salimos de una y ya caemos en otra. Nos están jugando a la sicológica, nos hemos invadido de terror, de muerte: el pánico ya no permite que veamos lo bueno, lo justo, lo bello, solo vemos lo malo, los errores y no podemos mirar a la gente buena y a todas las bondades que encierra nuestro Ecuador. Solo por estar en la Mitad del Mundo y tener el corredor turístico de allí a las Pirámides de Cochasquí, pasando por el cráter del Pululahua, tenemos una maravilla en todo: pasamos a la prov. de Imbabura: San Antonio, Otavalo, Cotacachi y por fin a Ibarra. Por Dios, abran los ojos y vean, coman, gocen de todo un país maravilloso, generoso, lleno de alimentos nuestros, sanos. Nuestra gente asustada siembra, cosecha, vende y comemos.
Nuestro país es corcho. El petróleo está mal, nos va mal. Peor ahora con el enfurecido río Coca, que crece y rompe todo y desmorona su cauce. A cambio salen toneladas de oro y de plata, desde Zamora por Puerto Bolívar al Canadá y al mundo. 45 minas funcionan; oro, plata, uranio, cobre por toneladas y más metales y más arenas y calizas. De forma legal e ilegal. Así es nuestro país, como lo ha sido siempre: nuestro, bondadoso, generoso y único. Donde cada provincia es un prodigio que debemos cuidarlas y protegerlas.