Ecuador desde la época republicana de 1830 ha tenido una deuda externa con Inglaterra y con otras potencias mundiales económicas. Y, desde esa época ha existido un default consuetudinario hasta la fecha.
Durante la presidencia de José María Urbina y Viteri en 1851, consolidó con intereses la deuda de 1 820 000 libras esterlinas suma sobre la cual hubo de emitir “bonos ecuatorianos”.
Por otro lado en la presidencia de Francisco Robles en 1856 a título de cancelar la deuda inglesa se hozo cesiones para cancelar esa deuda impagable traducido a los términos modernos como default (insolvencia), término inglés que se refiere a algo que se hace por defecto de incumplimientos de pagos, por parte de un deudor (Ecuador),que no puede pagar o deja de realizar los pagos correspondientes a su acreedor (Inglaterra) cayendo en cesación de pagos especialmente del valor principal y en algunos casos solo ha pagado apuradamente los intereses generados.
Y no es el caso único de Ecuador en América latina, también Uruguay en 2001, Argentina en 2001, y en la mayoría de los estados, como lo es actualmente Venezuela, que ha caído a un caso de insolvencia con tendencia a la quiebra, habiendo sido un país próspero en otrora.
También países europeos, como, Francia, Grecia, Ucrania en 1998, Rusia en ese mismo año, buscan morigerar conflictos bélicos producto de deudas, territorios, sociales, religiosos, etc.
Los organismos internacionales creados al término de la segunda guerra mundial 1945 tales como la ONU, OEA OMS, OPS, etc. deben realizar su papel de mediadores y de ayudas hasta de corte humanitario en temas económicos y financieros.
El caso ecuatoriano que debe ser atendido para beneficio de los ecuatorianos pues su comercio internacional se ha visto disminuido. Y, que hoy más que nunca necesitamos de la intercesión de estos organismos internacionales y la benevolencia de los países acreedores.
En consecuencia, deben realizar una condonación de estas deudas por lo menos en un 70%, por las razones específicas de ambiciones territoriales y de las marcadas enfermedades virulentas que diezman a estos países no capaces de cancelar deudas contraídas por gobiernos irresponsables.
Los estados débiles en su economía como nuestros estados americanos especialmente, que no cuentan con dinero líquido para hacer frente a su deuda, tratarán de buscar y alcanzar un acuerdo con sus acreedores para definir cómo concretar los pagos pendientes. Dichas negociaciones se desarrollan en un marco legal sin resultados positivos, que para el Ecuador durante 190 años no se han podido cancelar. Muy a pesar de que contamos con supervisión externa por parte de los organismos internacionales rectores de la justicia económica, de salud y financiera, Sin resultados favorables.
Así como cuando existen factores de improductividad interna de nuestros países, los organismos estatales, bancarios condonan estas deudas a los ciudadanos, empresas y demás organismos productivos, por las enfermedades que diezman a las personas, siembras, desempleo, mala educación y hambre. Sus gobernantes tratan de sostener la situación inmanejable. Y, tratan en lo posible conseguir beneficios para los sectores productivos.