El articulista de opinión y actor político opositor Enrique Ayala Mora comentó (24-04) el libro del exjefe del Comando Conjunto de las Fuerzas Armadas, general (s.p.) Ernesto González.
Señaló: “(…) Para muchos, el punto central del libro es que sostiene que el Presidente estaba “detenido” en vez de “secuestrado”, con lo que cuestiona en cierto modo la versión oficial (…)”.
El escritor Hernán Rodríguez Castelo, redactó el prólogo de la obra. Dijo claramente: “(…) un presidente que, ante un motín político en defensa de algún interés económico o clasista, iba a meterse, desafiante y bravucón, en pleno vórtice de la tormenta que iba arreciando y acabó secuestrado (…)”. Rodríguez Castelo, quien escribió el prólogo, es académico de la Lengua, o sea, un experto en el manejo del lenguaje y en el significado de las palabras, señaló que “acabó secuestrado”.
El general González lo calificó de “retención”, en su libro; Ayala Mora se refiere a que “estaba detenido”.
En todo caso, si el presidente Rafael Correa, aquel 30 de septiembre de 2010, estuvo secuestrado, o detenido o retenido, fue contra su voluntad, según es público y notorio, y que con toda seguridad, los historiadores serios sabrán señalarlo con mucha objetividad y sin pasión política.