En las medidas de tipo económico, creo que lo acertado es tomar decisiones oportunas con el objeto de evitar incertidumbre y/o especulación.
Concretamente me refiero a los cambios recientemente aprobados en la concesión de créditos del Biess y a la lenta tramitación de las reformas, todavía en estudio, planteadas por el Presidente.
En el primer caso, se reforma un Manual de Créditos del banco del IESS aprobado el 24 de abril, o sea hace escasos cuatro meses, en tanto que las reformas legales que deben ser aprobadas por el Parlamento se viene anunciando su envío desde febrero y no por ser expedidas en plazos cortos o aprobárselas con lentitud no van a cometerse errores.
En el caso de las nuevas reglas para la concesión de créditos del Biess, no creo que sea lo mejor otorgar financiamiento por el 100% del avalúo del bien que quiere adquirirse, porque los deudores tendrán “poco interés” en cancelarlos, subiendo el riesgo financiero, pese a que la morosidad de tales préstamos está en el 7%, frente a la banca privada que no llega al 3%. Y esto sin considerar que el cobro de las obligaciones vencidas, generalmente, encargadas a una oficina privada y pagarle una comisión.
En el caso de las reformas referidas por el Ejecutivo, no es posible concretar ningún comentario, porque sus textos han sido cambiados en muchas ocasiones.