Han transcurrido veinte años desde que publicamos “Ecuador hacia el siglo XXI” en el que partimos de avizorar “…un futuro … en que sobre el país, sumido en una serie de dudas que afecten las bases mismas de la juridicidad y de la solidaridad que debe imperar en toda colectividad, aparezca una grotesca ley de la selva, una auténtica ley del talión, que desprotegerá a los ciudadanos, que arrastrará culpable e inocentes, y que constituirá el arma más útil por parte de quienes detenten el poder, dirigida a sojuzgar los pensamientos libres de quienes ansían vivir en paz”. (Pág. 20). Es por ello que propusimos modificaciones con respecto a Funciones y Tribunales del Estado: Función Ejecutiva: “…elegir un digno Presidente que sea honesto y capaz y que aparte de ello, cuente con equipos de similares características”. (Pág. 50). Función Legislativa: “…reorientar la actividad de la Función Legislativa… y se cumplan con ciertos requisitos mínimos para poder ser elegido legislador”. (Pág. 141). Función Judicial: “…reorientar la actividad de la Función Judicial desde la propia designación de los magistrados de la Corte Suprema de Justicia y …despolitizar la propuesta de nombres y establecer requisitos rígidos”. (Pág. 141). Tribunal Electoral: “…todos sus miembros deban necesariamente ser independientes y, si esto no fuera posible, dar a los partidos políticos una representación que sea minoritaria…”. (Pág. 54). Tribunal Constitucional: “…desterrar definitivamente una acción política por cuanto los magistrados que ostentan tan altas funciones se constituyen en jueces en materias delicadas y elevadas…”. (Pág. 61).
Sobre la Corrupción dijimos: “Avanza como maligna enfermedad y corroe el cuerpo estatal. La corrupción puesta de moda, hasta a veces ya no es mal mirada”. (Pág. 290). Por ello propusimos: “…la Comisión Presidencial Anticorrupción…”. (Pág. 288) y sugerimos: “…prohibir la utilización de la obra pública nacional o seccional como promoción política”. (Pág. 289).
¿Cuál es la acción inicial inmediata a ejecutarse?: La Consulta Popular: “…debe realizarla un Gobierno al inicio de su gestión, en circunstancias en que un electorado lo ha elegido con esperanzas, justamente para realizar un cambio positivo”. (Pág. 140).
Veinte años después sigue vigente esta proclama: “Conciudadanos, a quienes sí nos preocupa el destino de esta República, debemos decir, a viva y fuerte voz, que es necesario terminar con la hipocresía, con el engaño, con el arreglo de intereses mezquinos, con la irresponsabilidad, con el saqueo y con la corrupción”.