Mi nombre es Rosita Ortega Vásquez, integrante de la Plataforma Justicia para Vanessa. El 14 de marzo/2016 se publicó la nota “21 de 73 crímenes de mujeres reciben sentencia.
El texto se refiere a una entrevista realizada a mi persona por el caso de Vanessa Landinez Ortega, mi prima hermana, que es investigado por la Fiscalía Provincial de Tungurahua.
Denuncio públicamente los cambios a conveniencia de la historia de las mujeres y sus familias. El lenguaje que utilicé en la entrevista fue distinto a cada una de las frases del texto, donde se deriva en la revictimización y el drama.
Mi preocupación, la de mi familia y la de la organización a la que pertenezco es que el feminicidio se sigue viendo como un drama, una novela que les pasa a las “desafortunadas”. Ese tratamiento anula la realidad estructural de la violencia feminicida, y además muestra a las familias como personajes dignos de lástima, que por el contrario se trata de personas empoderadas movilizándonos por el acceso a la justicia, hecho clave para la erradicación del feminicidio.
Exijo en adelante que las notas sobre feminicidio eviten un lenguaje revictimizante, sensacionalista, y se promueva en las/os lectores un contexto informativo que permita cuestionar la violencia de género; con información objetiva, especializada, sin especulaciones y morbo.
Nota de la Redacción: En la nota periodística referida, lo único que hizo este Diario es recoger la parte testimonial y humana del caso de Vanessa Landinez, con la debida autorización de su prima Rosa Ortega. Además, se incluyeron las cifras que muestran cuántos crímenes de mujeres han llegado a sentencia. No hay la intención de revictimizar a nadie.