Hace unos días hablaba con una amiga de mi gusto por las botas, de repente me interrumpe y me dice “Cevallos”, y que es eso pregunté,
-¿algún almacén en el centro?
-No está en Ambato, me responde es un pueblito lindo de puro zapatos.
Bueno no podía dejar de visitarlo, así que aprovechando el primer feriado, tomamos carretera rumbo a Ambato, averiguado un poco, Cevallos, está en Tungurahua, de hecho es Cevallos el cantón más pequeño del Ecuador, con 19 km cuadrados y 9 000 habitantes. El camino a Cevallos está muy bien marcado y supimos que llegamos cuando a los dos lados de la carretera nos encontramos con hermosos almacenes con grandes ofertas y precios cómodos. Seguimos con curiosidad rumbo a la plaza principal, rodeada de muchos almacenes con olor a cuero. Caminamos y empezamos a encontrar los talleres y fábricas de hermosas creaciones de botas y zapatos hechos en el taller de atrás o en la fábrica, me pareció que caminaba por las calles de Florencia donde los talleristas venden sus productos en el frente y manejan su taller en el fondo.
En Cevallos se respira trabajo, progreso y orgullo, no ha necesitado de subvenciones estatales para repuntar, aunque como atractivo turístico cuenta con una estación del tren, y una quebrada para hacer escalada.