La ausencia en los debates a la Presidencia de la República contrasta con la avidez que algunos de los candidatos lucharon para ser tomados en cuenta en la lid. Sin embargo, al momento de exponer sus planes para gobernar, dos de ellos desperdiciaron esta oportunidad cuando Diario EL COMERCIO, en unión a dos prestigiosas emisoras, resolvieron organizar este debate con el fin de robustecer la democracia. Si el voto es un deber, es responsabilidad de los candidatos, el exponer ante los medios sus planes, metas y alcances de las medidas que sacarían al pueblo del déficit económico, de salud, de educación y progreso. La ausencia de los candidatos a los debates quita al pueblo el derecho de saber elegir a conciencia qué candidato representa la mejor solución a sus problemas, tales como: creación de fuentes de trabajo, conocimiento en derechos humanos, acceso a una correcta educación de acuerdo a las capacidades e inclinaciones de nuestros niños y jóvenes, salud, con la ayuda de profesionales, medicinas y la lucha contra la corrupción con campañas de masificación sobre los valores éticos, morales, las normas y leyes más adecuadas, así como, un poder administrativo, resuelto a hacer valer los intereses de la población. El tiempo de imagen de impacto se acabó ni de la empatía a través de spots de marketing, estas prácticas maquillan y esconden al verdadero personaje que confrontaría los reales problemas .
Si con mucha insistencia reclamaron ser candidatos para intervenir, con mayor razón deberían hacer conocer sus planes por mejores días al pueblo.