El 21 de mayo del año en curso, a las 14 horas, concurrí a la Agencia Nacional de Tránsito acompañando a mi nieta para realizar el trámite de obtención de la licencia. Previamente se había obtenido en la Web el turno correspondiente, el que señalaba que debía presentarse en esa dependencia el lunes 21 de mayo 2018 a las 14:31.
Solicité información sobre el procedimiento y nos indicaron que en la pantalla aparecería el nombre y módulo al que debía acercarse. A las 14:15 minutos apareció el # en la pantalla y nos acercamos al módulo 26, al revisar los documentos el funcionario indicó que faltaban los documentos de Aneta. Yo le indique el señor que los mismos se encontraban en el auto en el parqueadero y me concediera unos minutos para ir a traerlos, pero nos respondió que el sistema controla todo y debíamos agendar en la web una nueva cita.
Hablé con la Supervisora de Licencias y le expliqué el caso recalcando el hecho que el turno era a las 14:31 y yo le solicité al funcionario que nos atendió me esperara unos 5 minutos hasta ir al parqueadero, razón por la que se nos dio una autorización para ser atendidos, sin embargo demoramos en la cola hasta ser atendidos por espacio de 30 minutos, porque durante ese tiempo miramos que funcionarios entraban con conocidos y eran atendidos de inmediato aplicándose el dicho de que “quien tiene padrino se bautiza”; de tal modo que se atendía a tres conocidos y uno de la fila. Considero que todos nos merecemos el mismo respeto y atención y si se proclama que en las instituciones estatales se va a combatir la corrupción, eso también es corrupción.