¿Richard Carapaz podrá llegar a coronarse en Verona?

Richard Carapaz, en el Giro de Italia. Foto: EFE
Richard Carapaz terminó la primera semana del Giro de Italia de manera excepcional. Los ciclistas generalmente se dividen entre especialistas en montaña y velocistas. Y a pesar de que las nueves primeras etapas tuvieron rutas que favorecieron a los 'sprinters', el ecuatoriano salió muy bien librado y se ubica en el puesto 20 de la clasificación general.
El carchense sorprendió desde el primer día, en la contrarreloj que se corrió desde Bologna hasta San Luca. En un trayecto de 8 kilómetros, Carapaz voló y aprovechó la trepada final para registrar un tiempo de 13' 41'' y perder solo 47 segundos en relación a esa moto humana que es el esloveno Primoz Roglic.
Después vino la histórica cuarta etapa de Orbetello a Frascati (235 kms), hecha para que los velocistas saquen ventaja. Una ruta con apenas un puerto de cuarta categoría y con escasas trepadas. Pero Carapaz se mantuvo sigiloso. Aprovechó una montonera del pelotón y llegó a los metros finales rueda a rueda con algunos de los favoritos. Y a falta de 600 metros remató de manera impresionante para llevarse el primer lugar por encima de dos monstruos como el australiano Caleb Ewan y el italiano Diego Ulissi.
Y para confirmar su buen momento, la 'Locomotora del Carchi', como lo bautizó el relator argentino de ESPN Mario Sábato, volvió a hacer una contrarreloj fantástica en la etapa 9 (34,8 kms de Riccione a San Marino).
Bajo un fuerte aguacero, el carchense salió algo nervioso, según lo reconoció él mismo, pero remató en los últimos 12 kms y se ubicó en el undécimo lugar, a 1' 55'', otra vez de Primoz Roglic.
'Richie' es un ciclista que se forjó en las montañas de su natal El Carmelo, en la provincia del Carchi. Sus entrenamientos los hizo a más de 3 000 msnm y está perfectamente adaptado a la montaña y al frío. Y a partir de la etapa 12, que se disputa el jueves 23 de mayo desde Cuneo a Pinerolo, el Giro debería empezar a favorecerle, porque se correrá en las montañas del norte de Italia.
La etapa reina se disputará el martes 28 de mayo desde Lovere hasta Ponte di Legno, un día antes de que Carapaz cumpla 26 años. Serán 226 kms sin un solo metro de tregua para los ciclistas, que subirán la Cima Coppi, el punto más alto del Giro a 2 618 msnm. Y después, el pelotón deberá ascender al Mortirolo, un puerto de primera categoría a 1854 msnm, del que saldrán bien librados solo los grandes candidatos al título.
Carapaz ha repetido desde el primer día que se siente muy cómodo y con energía para correr en el más alto nivel las 21 etapas de este Giro de Italia, que es uno de los más fuertes que se ha corrido en los últimos años, con un trayecto total de 3518,5 kms.
Pero el carchense también ha repetido todos los días que el líder del equipo Movistar es el español Mikel Landa, que por ahora marcha 10 puestos por detrás de Carapaz en la clasificación general.
El ciclista ecuatoriano tendrá que librar varias batallas si quiere mantenerse en pelea hasta la última etapa del Giro de Italia. Primero, debe demostrar en el asfalto que es el mejor corredor de su equipo, para asegurar que los gregarios del Movistar Team lo respalden en estas dos semanas que restan. Después tendrá que pelear contra los favoritos de la competencia, como los italianos Valerio Conti y Vincenzo Nibali, el esloveno Roglic y por supuesto el británico Simon Yates, que por ahora viene en el puesto 24.
Para ganar un Giro de Italia no es necesario coronarse en varias etapas, sino correr de manera estratégica y saber dosificar para llegar con piernas hasta la última etapa. Y eso es lo que ha hecho Carapaz. Se ha cuidado en las etapas intensas, no ha perdido mucho tiempo con relación a los grandes favoritos y ha explotado en las cronos individuales.
Ahora empieza la montaña y es hora de demostrar que en verdad es una locomotora. El Giro termina con una contrarreloj en Verona el próximo 2 de junio. Serán 17 kilómetros, en los que ojalá podamos ver al ciclista carchense dentro del podio.