Análisis internacional

La columna se enfoca en alguno de los más importantes temas de la semana de impacto mundial y latinoamericano. Aspectos políticos y de coyuntura con fuentes de medios internacionales acreditadas. Otros artículos del autor: http://bit.ly/GnzloRuiz

Gonzalo Ruiz Álvarez

Gonzalo Ruiz Álvarez es Subdirector Adjunto de este Diario desde 2008. Ha sido articulista de opinión en EL COMERCIO desde 1991. Dirige el espacio de opinión matutino en Radio Quito y Platinum FM. Ha trabajado en radio y TV desde 1978.

Comicios sin Maduro o con Maduro y su control

Los diálogos en la búsqueda de una salida a la profunda crisis política, económica y humanitaria de Venezuela hablan de elecciones.

La cita de Barbados, que no debe tapar los efectos contundentes del informe Bachelet, plantea dilemas.

Se habla de una salida ‘democrática’. Claro, si podemos convenir que Nicolás Maduro ejerce un Régimen de facto como producto de su autoritarismo, represión y falta de libertades. Aunque para algunos el hecho de haber adelantado elecciones y haberlas ganado es suficiente aval.

Si Maduro no adelantaba elecciones el año pasado, si el sumiso Consejo Nacional Electoral promovía elecciones limpias sin interferencia del poder Ejecutivo y participación libre, el resultado hubiese sido otro. Fueron unas elecciones con más de un centenar de políticos opositores en la cárcel.

Como consecuencia, las protestas populares subieron de tono y la autoproclamación como Presidente Interino, quien encabeza la Asamblea Nacional, elevaron a categoría de discusión mundial la naturaleza del Gobierno de maduro y su camarilla.

Como si no hubiesen bastado los largos años de abuso del poder de Hugo Chávez y su sucesor elegido a dedo por el comandante. Como si el abuso, la imposición y el caudillismo reafirmado por el poder militar no hubiesen sido motivo suficientes para que la comunidad internacional lo cuestione.

Pero la persecución a Juan Guaidó y el reconocimiento de más de medio centenar de gobiernos no fueron argumentos suficientes. El Gobierno sigue apertrechado en su muralla de sangre y fuego resistiendo a una oposición que se desgasta demasiado.

Ahora en Barbados discutieron de elecciones. Los duros de Maduro no quieren saber nada. Otros hablan de elecciones pero con Maduro de nuevo de candidato.

Lo ideal sería que la tutela de la comunidad internacional garantice elecciones libres y participación abierta para salir de esta dictadura afianzada con disfraz de democracia.