Los maestros realizaron este 11 de marzo del 2021 un plantón en los exteriores de la Gobernación de Tungurahua. Foto: Modesto Moreta/ EL COMERCIO.
Un grupo de maestros jubilados realizó un plantón en los exteriores de la Gobernación de Tungurahua para exigir al Gobierno Nacional el pago del incentivo jubilar hoy, jueves 11 de marzo del 2021. Según los dirigentes, al menos 11 700 maestros a escala nacional aún no reciben este beneficio por parte del Estado.
Tito Carrillo, dirigente de la Coordinadora Nacional de Maestros en Tungurahua, explicó que en la provincia al menos 600 profesores no reciben ese beneficio. El Gobierno no cumple con los pagos pese a que en octubre del año anterior se firmó un documento que entregaría este año USD 200 millones para pagar a los jubilados. “La idea es que se cancele en orden de prioridad”.
Explicó que si no se atiende los pedidos, la próxima semana, iniciarán plantones en las afueras de las gobernaciones de todo el país exigiendo el pago. “El Presidente de la República está de salida y no ha cumplido con los maestros, nuevamente va a dejar al nuevo gobierno la deuda, no estamos en condiciones de esperar sentados hay compañeros enfermos que requieren la entrega de los recursos”.
Carrillo explicó que si no son atendidos se irán a una huelga de hambre. Indicó que cada año se va incrementando el número de maestros jubilados que a escala nacional alcanzan los 11 700.
Edmundo Curipallo, maestro jubilado, contó que hace seis años dejó el magisterio tras cumplir 43 años de docencia en el Instituto Superior Hispano América. Hasta el momento no se les cancela el incentivo jubilar que es un derecho irrenunciable.
“Dejamos toda una vida en una institución educativa y se nos debería reconocer. Las autoridades se olvidan que también fueron educados por un maestro para que estén ahora en esos cargos”, manifestó enojado.
Otro de los maestros es Nicolás Freire, de 65 años. Contó que hace 15 días, recibió del Ministerio de Educación un mensaje donde constaba en la lista de las personas que recibirían este beneficio, pero cuando fue averiguar en el Distrito ni en la coordinadora de educación conocían de este tema. “Estoy enfermo, mi esposa requiere de una operación y no tenemos dinero, solo nos engañan con ofrecimientos”.