Los moradores de Unión del Toachi viven en las faldas de una montaña con falla geológica. Foto. Juan Carlos Pérez / EL COMERCIO
Los moradores del recinto Unión del Toachi, ubicado en el kilómetro 71 de la vía Alóag – Santo Domingo, se niegan a la evacuación de ese lugar.
Los informes técnicos del Municipio de Santo Domingo refieren una reubicación del poblado debido a una falla geológica en la montaña. El suelo de esta elevación está suelto por la sobre saturación de agua en el interior de la montaña.
Por ello, el alcalde Víctor Manuel Quirola consiguió un terreno de 10 hectáreas en el sector El Paraíso para el reasentamiento de más de 100 familias. En el 2014 el sector fue declarado una zona de riesgo por la Secretaría de Gestión de Riesgos y se determinó la evacuación. “Necesitamos el aval del terreno y gestionar con el Miduvi para la construcción de las casas”, afirmó.
Pero la moradora Lucrecia Córdoba asegura que no puede dejar esos terrenos porque se dedican a la agricultura y ganadería. “Ese es el sustento económico de nuestros hijos. Nos vamos a la ciudad y no sabríamos en qué trabajar porque somos campesinos”.
En el informe técnico que presentó la Secretaría de Gestión de Riesgos a las autoridades de Santo Domingo, el pasado martes, consta que una de las remediaciones es reforestar el suelo, que en algunas parcelas es usado con fines agrícolas. Además se deben ejecutar, de manera urgente, trabajos de recuperación del ecosistema y ordenamiento territorial.
“Para que estos trabajos tengan prioridad se declaró a las 17 provincias en alerta amarilla por el fenómeno de El Niño y un estado de excepción en las zonas con vulnerabilidades”, señaló la coordinadora zonal 4, Orfa Cabezas.
La Prefectura de Santo Domingo de los Tsáchilas añadió que se debe trabajar no solo en Unión del Toachi, sino también en el sector de la confluencia de los ríos Toachi-Pilatón, que es de 185 kilómetros cuadrados. Esa zona fue declarada en alerta naranja en el invierno pasado por los más de 100 derrumbes que se presentaron.
Wilson Medina, presidente comunitario de Gestión de Riesgos de Unión del Toachi, afirma que desde el 2014 no se han realizado obras para mitigar los efectos de El Niño en el sector. “Solo reubicaron la escuela y el consultorio del Seguro Campesino, pero no hicieron obras en la falla”.
El alcalde Quirola aseguró que no se hicieron obras fuertes en ese sector porque está considerada como una zona de riesgos, que debe reubicarse en otro lugar que todavía se estudia. En estos sitios ya se han realizado dos simulacros de evacuación y se colocó señalética en caso de emergencia.
Mientras tanto, en el Concejo Municipal se prepara una Ordenanza para prohibir la construcción de nuevas viviendas, desde Unión del Toachi hasta El Paraíso. “El aumento de la actividad agrícola ha contribuido de manera negativa a destruir el equilibrio de los ecosistemas, lo que ha conllevado a una evidente inestabilidad de la zona”, dijo Quirola.
Según Cabezas, con el informe geológico se pueden tomar decisiones y comprometer a las autoridades. “Una de las medidas será que los habitantes no podrán construir más obras en el lugar, ya que hay fallas activas”, expresó.
Ese informe tardó dos meses de estudio, evaluación y análisis de vulnerabilidad.
En este documento se determinaron 90 observaciones de estabilización geométrica de taludes en un perímetro de 182 kilómetros, 15 tramos con fracturas geológicas y cerca de 100 viviendas que se encuentran en zonas de riesgos desde el
sector de Lelia hasta la parroquia Alluriquín.
La Prefectura tsáchila informó que se encargará del proyecto de reforestación, a ejecutarse desde principios de diciembre. Las tareas se cumplirán en Unión del Toachi, La Libertad y en el barrio San Miguel de Alluriquín. El prefecto Geovanny Benítez afirmó que la estabilización de taludes se cumplirá a largo plazo. “Es un proyecto plurianual del que deben participar todos, por eso le pedimos el permanente acompañamiento de la Secretaría de Gestión de Riesgos”.
En Unión del Toachi no se opondrán a estos trabajos porque prefieren eso a la evacuación. “Nos sentimos inconformes porque apenas cuando el fenómeno de El Niño está a las puertas hablan de esas obras de prevención”, dijo Medina.
La Gobernación convocará el próximo 27 de noviembre a la primera reunión de seguimiento para rendir cuentas de los trabajos de prevención en la parroquia de Alluriquín, que permanece en alerta naranja hasta que disminuya el riesgo en la población.