Cristina Prócel Villarroel, de 26 años, es velada esta noche. La joven falleció el lunes 12 de enero. Era una de las tres víctimas de la explosión causada por la fuga de gas centralizado, ocurrida el 10 de diciembre del año pasado en la Eloy Alfaro, en el norte de Quito. Foto: EL COMERCIO
Cristina Prócel Villarroel, de 26 años, es velada esta noche. La joven, de 26 años, falleció el lunes 12 de enero, luego de 33 días de internamiento en el área de quemados del Hospital Carlos Andrade Marín, en el norte de Quito. Era una de las tres víctimas de la explosión causada por la fuga de gas centralizado, ocurrida el 10 de diciembre del año pasado en un edificio ubicado en la av. Eloy Alfaro. Ella se había casado un mes antes de la tragedia.
Junto a su esposo, quien también resultó herido, no había vivido ni siquiera una semana en el edificio de la Eloy Alfaro, en donde ocurrió la explosión.
Su padre Eduardo Prócel, en medio del dolor, solicitó a las autoridades que se investigue lo que provocó la fuga. El caso está en manos del Cuerpo de Bomberos, entidad que cuenta con un informe preliminar de lo ocurrido.
Según Procel, las llamas no se habrían originado en el departamento de su hija. “Ella estaba en la cocina cuando todo ocurrió, si allí se habría producido el estallido hubiera muerto al instante. Si hasta los elevadores quedaron destruidos”, dijo durante la velación.
También contó que la joven presentaba quemaduras en el 40% de su cuerpo. “Las llamas le quemaron la garganta y pulmones y por eso no podía respirar. Estos 33 días pasó sedada y nosotros dedicados a ella”, contó.
De acuerdo con los Bomberos, la explosión tuvo una onda expansiva de 100 metros a la redonda.
El percance dejó tres heridos. Además, fueron afectados 25 casas, 12 edificios y tres autos. Según el Cuerpo de Bomberos, no están facultados a realizar controles o inspecciones para verificar el estado de los sistemas de gas centralizado. Esa institución solo concede los permisos.
El entierro de la joven se realizará mañana miércoles en el camposanto Monteolivo, en el norte de la ciudad.