Redacción Tulcán
Dany López arribó en su camión al Puente Internacional de Rumichaca, con 15 toneladas de tela para exportación, el miércoles.
Él se lamenta porque en lo que va de la semana no ha hecho otro viaje. “Antes de las restricciones que impuso el Gobierno a los productos colombianos, dejábamos la mercadería en Colombia y regresábamos a Quito con otro flete”, recuerda.
600 socios
tiene registrados la Asociación de Transporte Pesado en la provincia de Carchi.López ganaba mensualmente USD 2 500 y podía pagar a un chofer y darle mantenimiento al vehículo. Ahora, con los USD 200 semanales que le pagan por flete, apenas le alcanza para cubrir los gastos básicos de su hogar.
López es parte de una flota de 10 camioneros particulares que prestan el servicio a la empresa Transcomerinter. Carlos Benavides es otro de los socios. Él comenta que antes de las restricciones hacía ocho viajes al mes. Ahora no llegan ni a cuatro. “Nuestra situación es crítica. Dios no quiera que se me dañe el carro”.
Benavides quiere vender su vehículo para pagar un crédito que obtuvo en el banco. En las 35 compañías que ofrecen los servicios de exportación e importación entre Ecuador y Colombia también hay repercusiones.
Gandy Narváez, de la compañía de transportes internacionales ecuatoriana Contraine, contó que hace dos semanas despachó la última carga internacional para Colombia y no llegaron más pedidos. Antes de las restricciones, las 12 tractomulas de la empresa movilizaban papel y cerveza.
Ahora, los únicos que les contratan son los maiceros. La novedad, según Narváez, es que por el flete les pagan USD 1 por quintal, desde Babahoyo hasta Ipiales (Colombia). Antes, les cancelaban USD 1, 70.
Narváez añadió que también les afecta una decisión que adoptó hace poco el Ministerio de Transporte y Obras Públicas. Esa entidad fijó un peso máximo de carga para las tractomulas. “Podemos movilizar hasta 600 quintales y los carros tienen capacidad para 900 quintales”.
Narcisa Montenegro, gerenta de Midecar, comentó que en la almacenera trabajan 25 personas, entre personal administrativo, conductores y estibadores. Ella aún no ha pensado en despedir a sus empleados, pero hay pérdidas en la empresa.
En Midecar, antes de la vigencia de las salvaguardias a las importaciones, en operaciones de carga y descarga tenían un promedio de 4 680 toneladas anuales.
En el primer semestre de este año la cifra llegó a 1 965. “Son decisiones apresuradas que no nos benefician”, agregó.
En los dos últimos meses, por el Puente Internacional de Rumichaca disminuyó el ingreso de cerámica, autos, zapatos y medicamentos, principalmente.
Germán Proaño, jefe del Servicio de Vigilancia Aduanera, reconoció que en cerámica tienen que gastar por kilo un monto adicional de USD 0, 25, por la salvaguarda cambiaria.
Durante la semana pasada, pasó por Rumichaca un promedio de 130 carros diarios con mercadería importada. Hasta inicios de este año el promedio era de 250.
En las estadísticas de la Corporación Aduanera Ecuatoriana (CAE) se nota un incremento en las recaudaciones, por los altos aranceles. Hasta julio de este año se recaudaron USD 107 292. En el mismo período del año pasado, la recaudación fue de USD 76 000.
Para protestar en contra de las salvaguardias, hoy se cumplirá una movilización de los transportistas y comerciantes de Carchi y del departamento de Nariño.
Ayer en la tarde, representantes de los comerciantes, gremios artesanales y otras organizaciones productivas se reunieron con Omar Guerrón, presidente del Transporte Pesado de Carchi. Él pidió que la manifestación sea pacífica y que se eviten enfrentamientos con la Policía.
Guerrón expresó que los 600 socios del transporte pesado no son los únicos afectados. “Hay comerciantes, estibadores, dueños de almaceneras, de restaurantes… que están en crisis por las medidas tomadas por el Gobierno”.
En su opinión es ilógico que mientras se incentivan los créditos a los transportistas para el cambio de unidades, se impongan medidas restrictivas. “¿Cómo se van a pagar los créditos?”.
Tanto Guerrón como Óscar Villota, presidente de la Asociación de Transporte Pesado de Colombia, critican la falta de acuerdos entre los gobiernos de Ecuador y Colombia. “No es posible que hasta ahora las autoridades no entiendan que los pueblos fronterizos viven del comercio”.
La movilización se iniciará a las 09:00 y partirá desde el sector de El Minguero hasta el parque de la Independencia.
A las 12:00, los transportistas pesados irán hasta Rumichaca y ahí se firmará un documento binacional con los pedidos que se entregarán con antelación en las gobernaciones.
Otros afectados
Óscar Villota, presidente de la Asociación de Camioneros de Ipiales, dijo que de los 3 000 transportistas afiliados a su gremio, la mitad tiene deudas por la renovación de sus unidades.
Los 120 estibadores que pertenecen a la Asociación trabajan a medias. Antes ganaban un promedio de USD 15 diarios. Actualmente no llegan ni a la mitad.
En la Dirección Aduanera de Colombia se habla de una disminución del 15% en los trámites de exportación e importación. El Instituto Colombiano Agrario restringió el ingreso de arroz ecuatoriano.
Aunque se incrementaron unidades de transporte pesado en Carchi, en los últimos tres años, hay descontento por la actual crisis y se piensa en la venta de los carros. Hasta 2004, en Carchi estaban registradas 420 tractomulas, la mayoría en Julio Andrade y Huaca.