Entre los vehículos que se subastan están camionetas doble cabina y motos. Foto: Alfredo Lagla/ EL COMERCIO
En la Escuela de Formación de Policías José Emilio Castillo Solís, ubicada en Tambillo, en las afueras de Quito, continúa la subasta de vehículos, que empezó el lunes pasado. Se trata de un lote de 1 478 automotores, cuyos modelos van entre el 2004 y el 2009.
La mañana de este jueves, 14 de enero del 2016, en el interior de la Escuela de Formación se observó a decenas de interesados en ofertar y en revisar los vehículos o simplemente observar con interés de qué se trataba.
En un terreno se encontraban los vehículos que iban a ser subastados. Sobre el parabrisas de cada automotor se veía un rótulo que indicaba el precio base con el que podían iniciar las ofertas. En un extremo del amplio terreno había vehículos con precios de USD 2 500 y otros de USD 3000 y 4 000. Y motos de 600 a 1 000.
Al momento de iniciar con la subasta, si se trataba de una camioneta, la persona que dirigía el evento se subía en el cajón del automotor, para que todos los asistentes lo pudieran ver. De esta forma primero se anunciaban las características básicas como el modelo, el año, el motor y si funcionaba a diesel o a gasolina.
Rápidamente pronunciaba el valor base y preguntaba “¿Quién da más?”. Finalmente el nombre de la persona que ofertaba el valor más alto se repetía hasta tres veces y era declarada favorecida.
Tras este proceso, la persona que se llevaba el vehículo debía entregar su cédula para el registro y continuaban con el siguiente vehículo. En un extremo de las instalaciones de la Escuela de Formación se ubicaron bajo carpas, unas mesas, para que las personas que desearan servirse alguno de los platos que ofertaban, ahí lo hicieran. Mote con chicharón o cevichocho estaban en el menú.
A la subasta algunos iban con un periódico en mano. En este se encontraba al detalle la lista de los vehículos. El organizador de la venta de los automotores de las nueve zonas administrativas del país y de las dependencias de la Policía es la Junta de Remates del Ministerio del Interior y de la Policía Nacional.
En oferta hay automóviles, buses, camiones pequeños, camionetas y motos. Estas últimas eran de especial interés para Víctor Vallejo, de 56 años, quien arribó desde Edén del Valle, para observar el proceso porque dijo que el sábado participará en la subasta de motos.
Tiene previsto gastar entre USD 800 y 1 200 como máximo. Él es técnico de motos y planea repararla. Le atrae la subasta porque los vehículos son de marca y considera que habrá otros interesados en el mercado.
En eso coincide José Llugcha, de 62 años, quien participó de la subasta. Él es comerciante de automóviles y le atraen estos vehículos por los precios bajos. Calcula que invertirá unos USD
2 000 a 3 000, en una camioneta, que luego espera poner a la venta.
Los interesados pueden inscribirse antes de participar en la puja, en el mismo lugar de la subasta. En el interior de la Escuela de Formación hay un vehículo de la Policía, en donde se recepta el dinero, hasta USD 3 000, dice un rótulo fuera de ese vehículo. Si la cifra es mayor se debe depositar el monto en una cuenta de ahorros.