En la calle Cóndor Ñan, en Quitumbe, fue hallado el cuerpo de Carla Muy, de 22 años. Foto: Julio Estrella / EL COMERCIO
La gente contemplaba en silencio la escena: cuatro policías subían a una plancha metálica el cuerpo de Carla Muy, de 22 años. “¡Asesinos, asesinos!”, gritaban dos mujeres.
Eran la madre y la hermana de Carla, quienes miraban cómo el cadáver de la joven era cubierto con una bolsa de plástico e ingresaba a la ambulancia de Medicina Legal de Quito.
Esto sucedía el lunes en Quitumbe, un sector del sur capitalino. La misma escena se repitió a las 15:30 de ayer. La Policía recogió el cuerpo de una mujer de 40 años, que apareció en el interior de su casa, en la Ferroviaria Baja, también en el sur.
Los vecinos aseguraron que la víctima fue supuestamente atacada con un machete.
Ellos escucharon los gritos y al tratar de socorrerla la hallaron boca abajo en la cocina. En ese momento ya no tenía pulso.
Solo entre el sábado y las 15:00 de ayer, la Dirección de Delitos Contra la Vida (Dinased) ha reportado seis muertes en Quito.
Un poco después de que los policías levantaron el cadáver de Carla se alertó de otro crimen en el barrio Atucucho, en el norte de la urbe.
Esta vez, la víctima era un hombre de unos 30 años. Tenía una herida de cuchillo en el tórax y su cuerpo quedó tendido en la calle Carlota Jaramillo.
La madrugada de ayer fue hallada otra persona sin vida. Estaba en el botadero de basura de Zámbiza, en el norte. Una mujer lo encontró cuando hurgaba entre los desperdicios.
Un investigador de la Policía dice que “diciembre es un mes conflictivo”. Y detalla que durante las festividades se dan más hechos violentos que terminan en muertes. Uno de los factores que incide es el consumo de alcohol, que en diciembre aumenta un 25% en relación a otros meses, según el Consep.
Datos oficiales señalan que en Quito los homicidios y asesinatos se redujeron en un 17% respecto al 2014. Esto significa que tiene una de las tasa más bajas de homicidios del país: 4,4 por 100 000 habitantes.
Actualmente, el 60% de los crímenes son resueltos. Así lo confirma el Min. del Interior.
Las primeras alertas sobre muertes registradas en estos días se prendieron el sábado.
A las 02:00, los uniformados confirmaron la muerte de Washington Baldomero, de 24 años. El cuerpo sin vida apareció en la Ciudadela del Ejército y los investigadores no descartan que el deceso se haya producido por el abuso de alcohol.
Su cuerpo estaba tirado en media vía, entre las calles A y B. Un morador que pasaba por ahí creyó que se trataba de algún vecino que debido al estado de embriaguez se quedó dormido a la intemperie.
Al acercarse notó que no tenía signos vitales y que presentaba un corte profundo en el brazo derecho. En ese momento se asustó y pidió ayuda.
Los investigadores recogieron evidencias como rastros de sangre que dejó la víctima y se extendían a lo largo de una cuadra. Los testigos dijeron que lo vieron ingerir licor en compañía de amigos en una casa del sector. Allí los agentes descubrieron una ventana rota.
Al parecer, en esa casa ocurrió un altercado. La ventana se rompió y el joven se causó una herida con los vidrios.
En el caso de Carla fue también un morador el que descubrió el cuerpo. Estaba en un terreno baldío de las calles Cóndor Ñan y Lira Ñan, en Quitumbe, en el sur.
Solo unos matorrales lo ocultaban de la gente, que transitaba cerca. Rafael Enderica pasaba por allí. Vio que la chica vestía un jean y una chompa rosada. Notó que en el cuello tenía una bufanda y el cierre del pantalón estaba entreabierto.
La joven llevaba una noche desaparecida. La última vez que la vieron fue el domingo a las 20:00, cuando salió del salón de belleza en el que trabajaba.
Ese día no llegó a su casa en Chillogallo, y tampoco contestó su celular. Su novio la llamó hasta la 01:00 del lunes, pero enseguida se iba al buzón de voz. Él fue el primero en llegar al terreno baldío. Los policías lo dejaron acercarse al cuerpo para que lo identificara.
Tras verla, se abrazó con la familia. Asintió con la cabeza cuando le preguntaron si se trataba de Carla.
Las causas de su muerte todavía no son claras, pues el caso se encuentra en indagación. Pero la Policía investiga si fue víctima de una agresión sexual.
Los agentes también indagan otro cuerpo que apareció en Quitumbe. De él no se saben no sus nombres ni la edad exacta.
En contexto
El Ministerio del Interior asegura que el país experimenta una reducción de los homicidios desde el 2009 cuando registró la tasa más alta, de 18,74 muertes por cada 100 000 habitantes. Este año, la Policía prevé cerrar la estadística con una tasa de seis puntos.