Las calles son de tierra y las casas de adobe. Los campesinos vestidos con ponchos de lana cruzan un puente de madera tendido sobre el río Pun en la frontera norte. Es La Victoria, un pueblo de 74 495 habitantes que pertenece al municipio de Ipiales (Colombia).
Este queda ubicado frente a la localidad de Santa Bárbara, un cantón del fronterizo Sucumbíos.
Según informes de Inteligencia de las Fuerzas Armadas (FF.AA.), este es uno de los cuatro centros de abastecimiento de las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC) en Ecuador.
“Llegan (de civil), compran comida y se van. Lo que más se llevan es el arroz. Ahorran cerca de 5 000 pesos (USD 2,70)”, señala un poblador de Santa Bárbara, que tiene solo 600 habitantes. La mayoría de ellos se dedica a la agricultura y a la ganadería.
¿Qué clase de productos adquieren los guerrilleros en el país para abastecerse? Las investigaciones de los militares señalan que los grupos subversivos se proveen de forma permanente en Ecuador. Por ejemplo, en Santa Bárbara compran víveres (arroz, frutas, azúcar, hortalizas, agua) y gasolina para las motocicletas.
Otro punto es la parroquia El Chical (noroccidente de Tulcán), donde también adquieren combustibles y cemento. “Las unidades del Bloque Sur de las FARC, que son las más cercanas a Ecuador, adquieren todo lo relacionado con la logística para mantener las vías de abasto”, explica el general Fernando Proaño, jefe de la Fuerza de Tarea número 1 de las Fuerzas Armadas. “La gasolina y el cemento sirven para el procesamiento de la droga. La gasolina blanca es un precursor químico conocido como éter de petróleo”.
Un pequeño puente, de 50 metros de ancho, separa a El Chical de Tallambí, otro poblado colombiano en el que tiene injerencia el Frente 48 de las FARC. El coronel Julio Barragán, ex comandante del Batallón Galo Molina de Tulcán, dice que ese bloque subversivo se dedica únicamente a dotar de provisiones a las diferentes columnas guerrilleras del sur.
Para llegar a Tallambí, advierte un morador de la zona, se debe dejar todo en El Chical. No se puede pasar con cámaras de fotos, celulares o videograbadoras, peor con armas. Los ‘guerros’, como los llaman en Ecuador, “vienen a hacer compras. Usan ponchos y sombreros como los campesinos de acá. No traen armas y hasta conversan con nosotros”.
En la parroquia El Carmelo (Carchi), separada de Colombia por el río Pun, los guerrilleros cruzan la frontera a diario, especialmente los viernes, el día de la feria, dicen los militares. Pero lo hacen siempre de civil.
Con calles adoquinadas, agua potable, alcantarillado y una nueva carretera asfaltada de 25 kilómetros que lo conecta con Julio Andrade, una parroquia de Tulcán, en Carchi, El Carmelo es considerado como una especie de despensa de los subversivos.
Y es que al frente se ubican las veredas de San José Alto, San Antonio, La Palma, El Salado y La Victoria, en Colombia. Estas son dominadas por la guerrilla.
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Marcelo M. es un comerciante de El Carmelo. En su puesto ofrece calzado. En la feria, lo que más vende son botas de caucho. “Compran las charupis (botas) y los ponchos de lana para ponerse cuando vienen al Ecuador y pasan inadvertidos. Así se confunden con los campesinos”.
El teniente Miguel Almendáriz, del destacamento de El Carmelo, explica que a los guerrilleros se los identifica por “el corte de cabello (tipo cadete) y la ropa. Mientras no vengan con armas de fuego, ni cometan delitos, no se les puede detener”.
Al frente está el poblado colombiano de San Antonio, que se caracteriza por sus fábricas de lácteos. Según militares ecuatorianos, ahí se desenvuelve la V División de Finanzas de las FARC.
Las investigaciones militares indican que en la parroquia de Tufiño, también en el noroccidente de Tulcán, las FARC consiguen medicinas. Vecinos de ese lugar señalan que desconocidos con “rara actitud” llegan al pueblo y compran antibióticos.
El poblado de Chiles está separado de Tufiño por el río Játiva.
La provisión de comida, medicinas y vituallas para la agrupación rebelde se da en medio del inicio de las negociaciones de paz entre los líderes de la guerrilla y el Gobierno colombiano.
De acuerdo con los informes de la Policía colombiana, las FARC están debilitadas por los ataques del Ejército de su país. El bombardeo de Angostura, en el 2008, en el que murió el segundo comandante en rango del grupo, Édgar Devia Silva, alias ‘Raúl Reyes’, es considerado como el golpe más fuerte que ha recibido.
José Duarte, intendente de la Policía de Colombia, comenta que la guerrilla tiene problemas de abastecimiento y que años atrás podían mantener a los retenidos hasta por dos años en un mismo campamento, situación que en la actualidad no sucede.
La frontera norte
Tiene una extensión de 738 kilómetros. Hay 17 destacamentos militares. Tres en Esmeraldas, seis en Carchi e Imbabura y ocho en Sucumbíos (Amazonía).
El puente internacional de Rumichaca es el principal nexo entre Ecuador y Colombia. Junto al puente que cruza de Tufiño a Chiles, son los únicos legales. En Carchi hay 23 pasos ilegales.
Según el Ejército ecuatoriano, los subversivos tienen al menos cinco columnas de guerrilleros ubicadas en las poblaciones fronterizas colombianas.
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