La usual calma de la zona alta de Manta fue interrumpida por un asesinato. Ayer, a las 14:30, Honorio Cevallos, dirigente deportivo, copropietario de la clínica San Gregorio y empresario atunero fue acribillado. Cevallos estaba en la cevichería Telmo, ubicada en la avenida 20, entre las calles 10 y 11.
El empresario estaba acompañado por dos mujeres, una de ellas era Gina Saldarrega, y además, con Juan Carlos Bedoya, técnico del Delfín, un equipo de fútbol de la segunda categoría.
Una de las acompañantes de Cevallos comentó que los asesinos llegaron en una motocicleta. Uno de ellos se bajó y empezó a disparar contra Honorio; cinco fueron los proyectiles que le impactaron. Gina, quien estaba cerca al empresario, también recibió tres impactos de bala.
“Todo fue muy rápido, quisimos reaccionar, pero fue demasiado tarde y los asesinos se alejaron”, dijo la testigo. Cevallos fue llevado a la clínica San Gregorio. Allí los médicos lo operaron de inmediato, pero no pudieron salvar su vida. A las 16:20 murió. Gina fue trasladada al hospital público Rafael Rodríguez Zambrano. Hasta las 17:00 era sometida a una operación.
Personal de la Policía Judicial investiga el caso. Hasta las 17:15 de ayer aún no había un pronunciamiento sobre el asesinato.