En la gráfica aparece la entrada a Puerto Rico, frente a Corriente Larga, en Ecuador. Foto: Archivo/ EL COMERCIO.
Casi ningún transportista de Tumaco (Colombia) quiere ir a Puerto Rico. El pueblo colombiano, que está ubicado en la zona selvática de Nariño, es uno de los centros de operaciones de alias ‘Guacho’ y de su frente Óliver Sinisterra.
Militares colombianos que hablaron con este Diario lo confirman y dicen que entre sus misiones está recuperar ese sector. Ellos montan operativos para llegar a esa población colombiana, pero los disidentes de las FARC los atacan con ametralladoras, fusiles, bombas o morteros.
Por ejemplo, eso sucedió en octubre del 2017. Cuatro campesinos fueron asesinados por los ataques de los armados. Por eso, los militares entran y salen y las incursiones se hacen con más de 50 efectivos. No tienen cuarteles en esa localidad, ni tampoco retenes policiales. Eso ha ocasionado que los disidentes tengan el control de la población.
Así lo indica Inredh, un organismo de derechos humanos de Ecuador. Los investigadores de Inredh han visitado Puerto Rico y dicen que los armados tienen el control total. Los disidentes dan a la gente servicios de salud, comida, agua, electricidad y hasta fuentes de trabajo.
Todo lo hacen a cambio de que continúen con el cultivo de coca. De hecho, el programa de sustitución de cultivos del Gobierno colombiano no llega a ese sector. Los irregulares no lo permiten. Ellos han amenazado a los campesinos con matarlos si aceptan la ayuda del Gobierno. Esta información también ha sido confirmada por los soldados colombianos que operan en Tumaco.
Pero desde enero de este año, la injerencia de los armados también ha afectado a los ecuatorianos que viven en el cordón fronterizo, especialmente a las localidades de Corriente Larga y La Cadena.
Los dos sectores son puntos de paso que unen a Puerto Rico con San Lorenzo.
Las dos localidades están a unos 35 minutos de distancia. Esa cercanía ha hecho que los irregulares usen a San Lorenzo como punto de abastecimiento de comida, bebidas e insumos de limpieza.
De hecho, desde el mercado de San Lorenzo hay camionetas que salen cada dos horas hacia Corriente Larga. Una vez allí, la gente debe cruzar el río Mataje y al otro lado está la entrada a Puerto Rico.
Hasta hace dos meses, los ecuatorianos ingresaban por ahí sin miedo. Pero a inicios de marzo, los armados empezaron a prohibir el ingreso de nacionales. La situación se agravó con el plagio de Óscar Villacís y Vanessa Velasco.
La pareja fue retenida en Puerto Rico a mediados de abril y hasta ahora se desconoce su paradero. Su familia viajará el domingo 3 de junio del 2018 a Colombia, para pedir información al presidente Juan Manuel Santos.
Un policía de San Lorenzo también conocía de la injerencia de los armados en Puerto Rico. En los chats que un mayor mantuvo con alias ‘Guacho’, el insurgente le dice que quiere reunirse y que vaya a la entrada de Puerto Rico con un delegado del Gobierno.
El oficial le indica que está buscando al delegado. En otro mensaje, el irregular amenaza con secuestrar y matar a los civiles que estén en la frontera.
En los últimos dos meses, los militares dicen que patrullan constantemente en Corriente Larga y La Cadena.
El 1 de mayo, los irregulares atacaron con morteros a los soldados desde Puerto Rico. La gente de esas zonas tiene miedo de que existan más ataques. Algunos han salido de sus casas para evitar ser víctimas de los disidentes.