Ayer, el área de Audiencias de la Corte de Justicia de Cuenca, estaba repleta.
Funcionarios judiciales, policías, abogados, testigos y familiares seguían de cerca la audiencia de formulación de cargos contra 28 supuestos chulqueros.Ellos fueron detenidos la tarde de anteayer, en operativos realizados en varios mercados de la capital azuaya. La mayoría de los arrestados es de origen extranjero.
Los 11 fiscales a cargo de las investigaciones los acusan del negocio ilícito de prestar dinero a cambio de intereses usureros que bordean el 10% diario.
La Policía Judicial de Azuay estaba tras la pista de estas redes de prestamistas hace varios meses, por denuncias de perjudicados.
Se conoció que preferían a personas con familiares emigrantes, para asegurar el pago diario.
En la audiencia, los fiscales argumentaron que los inculpados llegaban hasta sus posibles clientes –propietarios de los negocios en los mercados- a ofrecerles el dinero de forma fácil.
Acordado el monto –que por lo general no superaba USD 300- como garantía firmaban una letra de cambio en blanco a favor del prestamista. Esas pruebas fueron presentadas por varios fiscales.
Además, talonarios donde llevaban los registros ordenados de los pagos diarios que hacían los clientes, tarjetas de identidad de otras personas, dinero…
El proceso de juzgamiento que empezó a las 09:00 estuvo dirigido por la jueza de Garantías Penales, Gina Bravo. Los acusados pasaban uno a uno, conforme fueron detenidos. Ninguno aceptó el cargo que se le imputó, argumentaron ser comerciantes y que no tenían que ver en hechos ilícitos.
Por ejemplo, los extranjeros Luis M. y Guver A., de 25 y 30 años de edad, insistieron en que venden arroz. Según ellos, dejan el producto a crédito a sus clientes y les cobraban un dólar diario. En cambio, Jaime C, de 48, dijo ser vendedor de ollas. A los tres se les dictó instrucción fiscal, pero solamente a los dos primeros la prisión preventiva. Hasta el cierre de esta edición, no se conoció a cuántos se les legalizó la detención.