Gonzalo Ruiz Álvarez. Especial para EL COMERCIO
Con una plaza casi llena, con la Banda Municipal atrasada y con viento mediado, se celebró la primera corrida de la Feria Jesús del Gran Poder saldada con una sola vuelta al ruedo a cargo del debutante Rubén Pinar, quien dio muestras de solidez y pundonor toreros y que a la postre dio la única vuelta al ruedo de la tarde erigiéndose como el triunfador.
Se lidiaron reses de Trinidad de variada capa, peso y comportamiento. Sobresalió el primer toro de la feria, Tamborilero de nombre, un castaño de 463 kilos de peso que lidió Rubén Pinar.
El guayaquileño Guillermo Albán en el segundo de la tarde y primero de su lote fue aplaudido en chicuelinas y talaverana en el quite con el capote. Con la muleta inició un trasteo por alto en el que se destacó en una serie con la mano derecha de buena factura. Cuando el coleta intentó el toreo al natural su enemigo tiraba gañafones y tras porfía manifiesta logró algunos naturales meritorios. Insiste Albán para alcanzar algunos pases por el pitón derecho. Con la espada pincha dos veces antes de dejar una estocada entera.
El cuarto, segundo del lote de Guillermo, fue un abanto que nunca rompió, soso y trotón. El quite por talaveranas fue el mejor momento del toreo de capa del torero ecuatoriano. Un buen par dejó el joven subalterno Hernán Torres. Empezó su labor muleteril de rodillas. Se puso por ambos pitones pero la embestida rebrincada de la res no colaboraba. Dejó tres cuartos de estocada. El toro fue pitado en el arrastre.
David Fandila, El Fandi, de Granada recibió a su primero con dos largas cambiadas, verónicas jaleadas seguidas con chicuelinas rematadas con media. Fandi fue muy aplaudido en banderillas, donde puso de manifiesto sobradas facultades, conocimiento de terrenos y una dosis de espectacularidad para arrancar ovaciones. Pronto se rajó el enemigo pese a lo cual el hispano intentó por naturales y logró una buena tanda de tres en los medios, antes de que se quede corto el toro. Mató de una estocada tendida y caída y dos golpes de descabello.
Serio y bien armado fue el segundo del lote de El Fandi lidiado en quinto lugar, de 521 kilos, el toro más pesado del encierro, al que saludó por verónicas y media apretada de rodillas. Quite aplaudido por navarras, tras un encuentro con el montado con poder pero con la cara alta. El Fandi logró la explosión de júbilo popular en banderillas. Alarde de facultades, galleo superior y ovación general. Encendido fue el inicio de la faena con el trapo rojo de rodillas y en tablas. El viento sopló, el toro se paró, cambió de lidia y mostró resabios y sentido. Abrevió de pinchazo y hábil estocada tendida. Unas pocas palmas acompañaron al toro en el arrastre. Algunos pañuelos inexplicables pedían la oreja. El diestro recibió una ovación.
Rubén Pinar, de Toborra, Albacete confirmó su alternativa. El primero de la tarde, a la postre el mejor del encierro, permitió lucidos lances de inicio por verónicas y chicuelinas y quite de la misma marca. Bien con las banderillas Javier Granizo, El Bille, en dos pares. Con la muleta y tras la ceremonia de confirmación de alternativa, el manchego inició con corrección una serie de pases por alto para ir prendiendo en escena sus dotes de temple con derechazos que aprovecharon al noble castaño de Trinidad. Prueba con la izquierda a sabiendas de su corta embestida para volver a colocarse sobre el lado derecho e hilvanar otra tanda antes de los adornos finales por manoletinas. Entra a matar y deja dos pinchazos y una estocada. El posible trofeo de una oreja queda en una vuelta al ruedo entre ovaciones.
En el sexto de la tarde la labor de Rubén Pinar alcanzó reconocimiento general. El joven matador fue empitonado en el saludo capotero tras varias verónicas apretadas. Una vez que tomó la muleta con entrega torería construyó un trasteo superior por derechazos, en los que poco a poco fue metiendo al difícil toro en la canasta hasta poderlo y dominarlo. Ensayo y pulseo al natural por el complicado pitón izquierdo que precedió a una nueva serie con la mano derecha conseguir entre ovaciones. Una estocada honda y dos descabellos que le dejaron sin premio tras una pundonorosa y torera actuación.
Hoy se celebra el segundo festejo del abono. Se trata de una novillada en la que actuará el rejoneador Álvaro Montes, los novilleros Javier Cortés y Álvaro Samper. El nacional se despide de novillero y mañana la borla de matador de toros. Hoy se lidiarán novillos de Mirafuente.