Hasta mayo del 2017, se han registrado 770 emergencias desde que inició la época invernal en octubre del 2016, en Quito. Foto: Eduardo Terán / EL COMERCIO
Descender pendientes, ingresar a espacios confinados y rescatar personas que se encuentran en situaciones de riesgo son algunas de las actividades que día a día realizan los 20 miembros de la Unidad de Rescate de la Policía Metropolitana de Quito.
Durante la época invernal que ha vivido la capital durante los últimos ocho meses, estos “hombres y mujeres han jugado un papel protagónico en las emergencias” que se han presentado, que hasta la fecha, mayo del 2017, suman 770, entre inundaciones, movimientos en masa, colapsos estructurales y caídas de árboles, según un reporte del COE Metropolitano.
Esta Unidad fue creada hace 5 años para responder de forma oportuna a las situaciones de riesgo que se presentan en Quito. Por el trabajo que han realizado actualmente colaboran con la Fiscalía en la búsqueda de osamentas, hasta el momento llevan 5 casos referentes al hallazgo de huesos humanos.
“Este es un trabajo duro, pero deja grandes satisfacciones. Uno sale de la casa y no sabe a qué situaciones se va a enfrentar en el día, pero la familia y el gracias de la gente es el motor que nos impulsa a a seguir”, señaló Juan Carlos Oviedo, responsable de comunicación de la Policía Metropolitana.
Su trabajo es complejo, requiere de fortaleza física, pero también emocional para enfrentar las adversidades que se presentan en los rescates de personas.
Cuatro canes de diferentes edades y razas también forman parte de la Unidad. Acompañados de sus instructores se someten a diario a actividades peligrosas, como descender a través de un arnés por las elevaciones, además de utilizar su extraordinario olfato para encontrar a las posibles víctimas.
“La Policía Metropolitana es una de las más antiguas de Latinoamérica, precisamente este 11 de mayo cumplimos 192 años de fundación y cada vez hemos ido evolucionanado para brindar un mejor servicio a la ciudadanìa”, señaló Oviedo.