La Comisión Metropolitana de Lucha Contra la Corrupción (Quito Honesto) acreditará a ocho personas para que sean parte de la Veeduría Fundación Marcha Blanca-Tasa de Seguridad Ciudadana.
Esta Veeduría estará integrada por Andrés Cordovez, Santiago Proaño, el sacerdote Luis Fernando Rea, Gustavo Ordóñez, Mónica Sánchez, Henry Jimbo y Lorena Toledo. El coordinador será Raúl Franco.
La agrupación será la encargada de revisar el uso del dinero proveniente de la tasa de seguridad. Este es un rubro que pagan todos los quiteños. El cobro se lo realiza desde el 2009.
El propósito de la Veeduría es auditar los ingresos, usos y resultados de las inversiones realizadas. El acto para la entrega de credenciales es hoy, a las 10:00, en el Salón de Sesiones del Municipio, en el centro.
Según un comunicado de Quito Honesto, también se inspeccionará el cumplimiento de objetivos que motivaron la imposición de la tasa de seguridad y los antecedentes jurídicos con los cuales se cobra este rubro.
Además, se revisarán los balances financieros, el uso del dinero en planes, programas y proyectos de seguridad y los índices de inseguridad en Quito.
Según cálculos de la Alcaldía, se han aportado cerca de USD 35 millones a través de la tasa de seguridad. El dinero era administrado por el Cabildo, a través de la Corporación de Seguridad (Corposeguridad), pero esa entidad, de carácter privado, fue liquidada y pasó a formar parte de la Secretaría de Seguridad.
La tasa de seguridad era invertida en Policía, Bomberos y convivencia ciudadana.
La meta del Municipio estuvo encaminada en la creación de Unidades de Policía Comunitaria (UPC) y la dotación de equipos, patrulleros e indumentaria para la Policía.