El próximo sábado, 14 de febrero, Día del Amor y de la Amistad, el alcalde de Quito, Mauricio Rodas, cumple nueve meses en funciones. En este tiempo, temas como el metro y el acuerdo con los transportistas generaron repercusión social.
El sector de la movilidad es más que sensible para los quiteños. Ese día a día de verdaderos periplos, de trancones, de empujones y de carreras urbanas para trasladarse de un lugar a otro hace que el tema de la movilidad tenga una extremada sensibilidad entre los capitalinos. Basta recordar la aceptación que generó aquellos inflables que se instalaron en plazas como la de San Francisco, para promocionar al metro. En el interior, a través de pantallas planas, se contaba cómo sería viajar en ese “moderno” sistema de transporte. Esto ocurrió en la anterior administración.
Ahora, la posta está en manos del alcalde Rodas, quien hace una semana “dio la gran e importante noticia de que Quito tendrá Metro”. Igual ocurrió cuando hizo referencia al acuerdo con los transportistas. Dejando de lado, por ahora, la falta de información en temas como las compensaciones económicas o el desglose de los valores que recibirán los transportistas, el acuerdo es un tema importante; siempre y cuando se lo cumpla como está anunciado. Están pendientes las tarifas de los taxis.
¿Y de ahí qué? Aún queda menos de tres años (poco en gestión pública) para que esta administración diga a los quiteños su visión y acción en cuanto a movilidad. El Metro es una parte, aún falta conocer sobre la gran redistribución de rutas urbanas, para que estas se conviertan en un complemento del nuevo sistema en todo el Distrito. Y así, poder hablar de un sistema integrado eficiente y de calidad que sea una alternativa para quienes tienen vehículo.
Por más de una ocasión, incluyendo los momentos de campaña, el alcalde Rodas ha expresado su amor por Quito. Coger al toro por los cuernos en el tema de movilidad será una muestra de ello.