Los familiares y amigos de la víctima piden con plantones y marchas que se haga justicia. Foto: Glenda Giacometti / EL COMERCIO
Cinco agentes de la Unidad de Mantenimiento del Orden (UMO) de Ambato custodiaron a un extranjero a su salida de la Fiscalía provincial de Tungurahua, este viernes 4 de enero del 2019. Lo vistieron con un traje policial para poder sacarlo del recinto. El joven es sospechoso del asesinato de Jonathan Pantoja ocurrido el martes 1 de enero.
En los exteriores del edificio lo esperaban los familiares, vecinos y amigos de la víctima. Portaban carteles, pitos y globos. “Justicia para Jonathan”, “máxima pena al culpable” entre otros gritos se escuchaba en el centro de la ciudad. Ellos reclamaban justicia por la muerte del joven, de 20 años, que fue apuñalado por tres ocasiones en el pecho y el cuello. Las mortales heridas provocaron su muerte en una de las calles de la parroquia San Bartolomé de Pinllo, noroccidental de la ciudad.
Según el parte de la Policía Nacional, el muchacho se encontraba libando en la esquina de la avenida Quiteño Libre, cuando cuatro personas le intentaron quitar la botella con licor que bebía junto a otros dos familiares, quienes permanecen asilados en diversas casas de salud, en estado crítico, por las graves heridas provocadas con arma cortopunzante.
“Les pedimos que se porten tranquilos y eso al parecer lo tomaron mal. Trataron de quitar a la fuerza las botellas y uno de los cuatro comenzó a lanzar puñaladas”, relató Franklin N., primo del fallecido.
Otro de los primos de Jonathan se debate entre la vida y la muerte en el hospital del Instituto Ecuatoriano de Seguridad Social. “El presunto agresor, de 33 años, intentó darse a la fuga pero a pocos metros del lugar logró ser capturado. Estamos realizando las investigaciones y ampliando versiones para que las autoridades judiciales aclaren este hecho”, indicó Javier Salazar, oficial de la Policía Judicial de Tungurahua.
Franklin N., indicó que la familia no descansará hasta que se haga justicia. Para eso realizan marchas y plantones. “Habrá una asamblea en la parroquia para decidir sobre los extranjeros que viven en la zona. Además de organizar un marcha por las principales calles de la ciudad”, aseguró el familiar.