La campaña para la Presidencia de la Cámara de Comercio de Guayaquil (CCG) se asemeja a un proceso electoral político. La publicidad está en medios de comunicación, vallas y en la red social Facebook. Los candidatos son dos: los empresarios Andrés Morales Carbo y Eduardo Peña Hurtado.El próximo 17 de mayo, más de 5 000 socios de la Cámara elegirán a su nuevo Presidente. María Gloria Alarcón dejará el cargo tras dos períodos al frente del gremio (2006-2010). En una reciente entrevista televisiva, ella afirmó que su trabajo estuvo volcado al servicio y representación de los socios de la Cámara.El candidato Morales cree que la CCG ha asumido una posición política. “Se ha concentrado en opinar, pero lo que sus socios quieren son resultados”. Por eso, no está de acuerdo con que la Cámara apoye marchas como la del pasado 11 de febrero, convocada por el alcalde Jaime Nebot.Su discurso es conciliador con el Gobierno. No solo está dispuesto a reunirse con el presidente Rafael Correa, sino que desde ahora le anuncia que, si llegara a ganar la elección, la Cámara únicamente manejará posiciones técnicas gremiales, “con un discurso muy respetuoso”. Aclara que no es cercano a Alianza País ni a ningún partido.Desde 1996 su empresa, Ecuaprimas, mantiene un contrato con Seguros Sucre, de propiedad del Estado. Allí su principal cliente es el Grupo Alarcón, es decir, la familia de la actual Presidenta de la Cámara. “No es que a mí Seguros Sucre me haga negocios, yo se los genero”, dice.Su compañero de lista es Carlos Lasso Mendoza, hermano de Guillermo Lasso, presidente del Banco de Guayaquil.El otro candidato es hijo de Eduardo Peña Triviño, ex vicepresidente en el gobierno de Sixto Durán Ballén, y ex gerente de Seguros Sucre. Peña Hurtado fue miembro de la Junta Cívica de Guayaquil hasta el 2003. Fue gerente de los canales Cablevisión y GamaTV, hasta que el Estado los incautó, en el 2008, por formar parte del patrimonio de los hermanos Isaías, quienes mantienen una deuda por el cierre de Filanbanco. Hace binomio con José Javier Guarderas, gerente de la consultora Sambito. María Gloria Alarcón le propuso ser candidato. Peña considera que el aumento del desempleo en el país y el bajo crecimiento económico están asociados a una política del Gobierno de “satanizar a la empresa privada”. Si resulta vencedor, intentará reunirse con el presidente Correa. Para lo cual pedirá la intermediación de su amiga Nathalie Cely, ministra coordinadora de la Producción. Él fue compañero de los hermanos Fabricio y Rafael Correa en el colegio San José La Salle. En la última década, la Presidencia de la CCG se ha convertido en un trampolín político. El papel protagónico que tuvo Joaquín Zevallos durante su presidencia lo llevó a dirigir el Ministerio de Comercio Exterior en el gobierno de Alfredo Palacio. Zevallos fue uno de los líderes de la marcha por el cierre del Banco del Progreso en 1999.Además, fue contradictor del ex presidente Lucio Gutiérrez, a quien le otorgó una ‘medalla de palo’ por considerarlo un mal Gobierno. “El presidente de la Cámara siempre debe ser un referente de opinión y esa opinión siempre va a tener un efecto político, no partidista”, dice Zevallos.El ex presidente de la CCG, Eduardo Maruri (2004-2006), también volcó al gremio a las calles para protestar contra la inseguridad en Guayaquil. Tras su paso por la Cámara formó el movimiento Uno, con el cual obtuvo una curul en la Asamblea Constituyente de Montecristi. Hoy es Presidente de Barcelona.Un futuro político para María Gloria Alarcón es incierto. Sus apariciones en los medios son escasas. Incluso, no aceptó una entrevista con este Diario.Su relación con el Gobierno es a través de la ministra Cely. En julio del 2008, el Estado se incautó de Toni, empresa de la familia Alarcón, por una supuesta vinculación con los bienes de los Isaías. Luego se la devolvió.A la pregunta si este episodio le bajó el tono a Alarcón con el Gobierno, el candidato Eduardo Peña contestó: “Seguramente”.Zevallos cree que quien presida la CCG debe renunciar a sus intereses personales para que, cuando las medidas del Gobierno afecten al sector económico, “tenga una voz suficientemente importante para decirlo”. En declaraciones anteriores, el presidente Correa afirmó que las Cámaras de la Producción son parte de la nueva oposición. A la CCG se le quitó la representación que tenía en la Comisión de Tránsito de Guayas, Categ y en la Aduana.