El Bloque 31 iniciará su producción a partir del segundo semestre del 2013, con una producción estimada inicial de 18 000 barriles diarios, en una primera fase. Y podrá llegar a un tope máximo de 25 000 barriles en el 2014, señaló ayer el gerente de la estatal Petroamazonas, Oswaldo Madrid.
La inversión para la explotación de este bloque, donde se encuentran los campos Apaika y Nenke (ver mapa), ascenderá a USD 365 millones. Actualmente registra un avance del 21%.
El bloque 31 ocupa el 80% del Parque Nacional Yasuní y, según Madrid, “lo importante es que tiene el respaldo de la licencia ambiental emitida en el 2007 a la petrolera Petrobras, la cual operaba previamente el bloque 31.
La inversión que se requiere para la explotación del bloque 31 ha obligado a la petrolera estatal a buscar alianzas con empresas internacionales, aunque también se pueden aprovechar los recursos del Banco del IESS, como ya se hizo con el campo Pañacocha.
“Hay empresas de Asia interesadas en financiamiento para desarrollar este bloque. Estamos viendo las opciones más viables. Se conversa con el Biess para aportar con financiamiento. Sería la opción más viable y ventajosa para el Estado”, añadió Madrid.
Las autoridades del Gobierno mantienen negociaciones con los representantes del Biess para definir la tasa de interés que pagarían por el financiamiento.
Este era uno de los temas que causó inquietud cuando el Banco del Afiliado decidió financiar la explotación del campo Pañacocha, ya que la petrolera estatal reconoció una tasa de interés del 5%, cuando el proyecto generaba una rentabilidad superior al 20%.
De concretarse la negociación con el Biess, el mecanismo de pago sería similar al utilizado anteriormente, es decir, a través de un fideicomiso. Bajo esta figura, los ingresos generados por la venta de crudo del bloque 31 entrarían a un fondo, a través del cual se pagaría a los financistas.
Uno de los temas que preocupa en este proyecto es el ambiental, ya que el bloque 31 está cerca del bloque ITT, cuyas reservas pudieran quedarse bajo tierra si la comunidad internacional aporta con recursos para compensar los ingresos que dejarían de llegar por la venta de ese petróleo.
El Gobierno ha vendido la idea a la comunidad internacional de proteger el ambiente con la no explotación del petróleo en el Yasuní. Sin embargo, en la misma zona, donde está ubicado el bloque 31, se prevé comenzar la explotación de crudo en el 2013.
Las inversiones
La evacuación de la producción del Bloque 31 será por tubería de aproximadamente 80 km, desde Apaika hasta Edén Yuturi, ubicado en el bloque 15.
Petroamazonas necesitará un total de USD 600 millones para desarrollar los campos del bloque 31.
Actualmente se realiza sísmica para analizar la factibilidad de tres nuevos campos en el bloque 31: Kuwatai, Minta y Pimare.